Con el acuerdo al que se llegó con las empresas del ramo de la industria del pan y expendedoras de gasolina, prácticamente se conjuró la posibilidad de huelga en los más de 240 emplazamientos que promoviera la CTM por revisión de contrato colectivo de trabajo, lográndose en promedio un aumento al salario del 10%, distribuido en un porcentaje directo al tabulador y en prestaciones.
Según lo dio a conocer el representante de la CTM ante los tribunales laborales, Antonio Yáñez, solamente quedan pendientes para el viernes 31 de enero algunas empresas madereras, las refresqueras y aquellas que pertenecen al Grupo Industrial Durango de Miguel Rincón.
Los últimos acuerdos a los que llegó la CTM con los patrones fueron con las panificadoras, con la aplicación de un incremento del 9% directo al tabulador, según lo informó Yáñez, mientras que en el caso de las estaciones expendedoras de gasolina los porcentajes fueron del 6.5% más 3% a prestaciones, como el bono de productividad y despensa.
Antonio Yáñez fustigó las cifras vertidas por el titular de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, Juan Ruiz Sura, quien dio a conocer el lunes pasado que apenas se habían firmado 78 acuerdos. Afirmó que ya son cerca de 200, por lo que reiteró que el funcionario en mención desconoce totalmente lo que sucede en la JLCyA, además de que “ni siquiera sabe cuál es su función”, dijo.
El saldo de la revisión contractual por los emplazamientos interpuestos por la CTM en Durango, es la obtención en promedio del 10% de aumento salarial, en su mayoría con el 6 y 7% directo al tabulador, más el 3 y 4 por ciento a bono de productividad y despensa.
Sobre los contratos que aún están pendientes de arreglo, Antonio Yáñez informó que se prorrogaron los plazos fatales de huelga para el viernes 31 de enero, día en que el diputado federal José Ramírez Gamero sostendrá una nueva ronda de negociaciones con el fin de llegar a un arreglo con los representantes patronales de las empresas madereras, que incluyen a las del Grupo Rincón, además de las dos comercializadoras de refrescos.
Las expectativas de arreglo son positivas, ya que hay avance en las negociaciones, emprendidas primero por los respectivas comisiones revisoras de los sindicatos correspondientes y después por el propio José Ramírez Gamero.
Hay el reconocimiento de la CTM en los casos de empresas madereras que enfrentan dificultades económicas a causa de la caída del mercado por el ingreso inmoderado al país de producto extranjero a menor precio, y que representa una competencia desventajosa para los empresarios locales del ramo, que tienen sus almacenes repletos de madera.
Antonio Yáñez reiteró la seguridad de que para el viernes 31 de enero, luego de la ronda de pláticas que encabece José Ramírez Gamero, se logre finiquitar los acuerdos finales con los más de 240 emplazamientos que se promovieran.