POR MARTÍN CHÁVEZ CHÁVEZ
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Pese al arreglo satisfactorio logrado con el Sindicato de Académicos, en la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN), continúa la huelga estallada el pasado sábado por parte del Sindicato Administrativo; las partes están abiertas al diálogo, pero no hay comunicación oficial.
Como se sabe, dentro de la Universidad existen dos sindicatos, --Trabajadores Académicos y Trabajadores Administrativos—y cada año la negociación se hace por separado.
Ayer, el director de la Narro Unidad Laguna, Juan José Muñoz Varela, informó que afortunada-mente se pudo resolver el conflicto con los representantes del Sindicato de Trabajadores Académicos a quienes se les otorgó un aumento del 4.3 por ciento directo al salario y 1.5 en prestaciones.
Además, se estableció el compromiso de atender las demandas relacionadas con la violación de cláusulas y el desvío de recursos del Fondo de Pensiones, depositado en la Unión de Crédito Rural (Unicrer).
Sin embargo, en relación a la huelga estallada por parte de los trabajadores administrativos, el director aseguró que están abiertos al diálogo en el momento en que los sindicalizados lo pidan, pero no ha habido acercamiento, reconoció.
De nueva cuenta lamentó que en este conflicto meramente laboral, resulten afectados investigado-res y estudiantes que sólo desean ampliar sus conocimientos.
Ellos no se han acercado
Por su parte, la Secretaria general del Sindicato de Trabajadores Administrativos, Irma Nora Rodríguez Martínez, declaró que “ellos no se han acercado” y aclaró que debe ser la administración central la que solicite la reanudación del diálogo.
“Nosotros vamos a continuar aquí en las puertas de la universidad y mantendremos la postura de no ceder plazas, que se respete la cláusula 23 que se refiere a vacantes y sustitución de plazas, precisó la dirigente sindical.
Rodríguez Martínez, aseguró que no es la intención de su sindicato perjudicar a la institución y reiteró que en cuestión económica no hay ningún problema, pero lo duro aquí es que la universidad pretende reducir la cantidad de plazas, punto que en el emplazamiento no se incluyó.
Abundó que ese tema debe ser analizado en una reunión de Congreso Universitario en la que participen alumnos, maestros, trabajadores y administrativos y se haga un análisis.
En relación al perjuicio provocado a los estudiantes, reconoció tal situación, pero explicó que por ello las autoridades deben dialogar.