Agencias
PEKÍN, CHINA.- Rusia está dispuesta a vetar en las Naciones Unidas un proyecto de resolución de Estados Unidos y Gran Bretaña sobre Iraq si con eso se protege “la estabilidad internacional”, dijo ayer el ministro de Relaciones Exteriores ruso Igor Ivanov, mientras que el gobierno de Bagdad anunció que comenzaría a destruir sus misiles Al-Samoud dos hoy sábado, en cumplimiento con las demandas de las Naciones Unidas.
Fuentes gubernamentales iraquíes dijeron que la demanda de la ONU era injusta y parecía tener objetivos políticos, pero añadieron que igualmente estaban dispuestos a iniciar la destrucción de los misiles y que esto podría comenzar hoy.
Un portavoz de los inspectores de la ONU, Hiro Ueki, confirmó que era probable que la destrucción de misiles comenzara hoy sábado, lo que le restaría argumentos a Estados Unidos, Inglaterra y España, que buscan el respaldo internacional para atacar a Bagdad.
“Habrá discusiones técnicas entre UNMOVIC (Comisión de Supervisión, Vigilancia e Inspección de las Naciones Unidas) e Iraq hoy en la mañana, tras lo cual el proceso de destrucción podría iniciarse”, declaró el portavoz.
“Rusia tiene el derecho a usar el veto en el Consejo de Seguridad de la ONU, y lo empleará si resulta necesario para el interés de la estabilidad internacional”, dijo Ivanov en una conferencia de prensa.
Los comentarios de Ivanov se registran un día después que China y Rusia emitieron un comunicado conjunto diciendo que la guerra contra Iraq “debe y puede ser evitada”. En el comunicado se pidió dar más tiempo a los inspectores de armas que se hallan en Iraq.
Estados Unidos está buscando votos para respaldar una resolución del Consejo de Seguridad que autoriza la guerra contra el régimen de Saddam Hussein. Francia y Rusia, ambos miembros permanentes del consejo, con poder de veto sobre las actividades de la ONU, así como Alemania, han propuesto un plan para que las inspecciones de armas continúen por cuatro meses más.
“Por supuesto, el poder de veto sólo puede ser usado para la paz internacional y la estabilidad”, dijo Ivanov. “En estos momentos, Rusia está en contra de cualquier nueva resolución que permita el uso directo o indirecto de la fuerza para resolver la cuestión iraquí”.
Por su parte, el canciller francés, Dominique de Villepin, dijo ayer que el compromiso iraquí para comenzar a destruir sus misiles Al-Samoud dos era un paso importante en el desarme de Iraq y mostraba que las inspecciones de armas de las Naciones Unidas dan resultados.
Los inspectores de armas de la ONU dijeron que el alcance de los misiles Al-Samoud dos excede el límite de 150 kilómetros establecido por las resoluciones del organismo internacional y el jefe de inspectores, Han Blix, dio de plazo a Iraq hasta el hoy primero de marzo para comenzar a destruirlos.
El jueves, el general Amir al-Saadi, uno de los asesores principales del presidente Saddam Hussein, envió una carta a la ONU en la que dijo que Bagdad aceptaba “en principio” la destrucción de los misiles.