Debido a las fiestas decembrinas las personas acostumbran matar animales en el patio de sus casas
EL SIGLO DE TORREÓN
CD. LERDO, DGO.- Persiste la costumbre de matar animales en la presente temporada, los corrales se convierten en rastros clandestinos, sobre todo de marranos que utilizan para las fiestas decembrinas.
El regidor, Roberto Favela Escobedo, de la comisión de Salud menciona que en Lerdo existe una mentalidad rural, ya que en colonias populares y medio rural optan por matar en la parte trasera de sus domicilios, lo cual es común.
?Los cerdos son lo más usual, sobre todo para las celebraciones de diciembre, como reliquias y posadas, todo esto empieza desde los festejos de la Virgen de la Purísima, después la Virgen de Guadalupe y Navidad, pero hay quienes le siguen de largo hasta febrero?, añadió.
El médico resaltó la importancia de esta acción, toda vez que matan en corrales, en colonias donde ni siquiera tienen pavimento y hay mucha tierra, además que no existe un control u operativo por parte de Salubridad o Salud Municipal para manejar esta situación que sigue creciendo.
Normalmente ?explicó- esto lo hacen en domicilios particulares y para vender, son muchos y están ubicados en la colonia 20 de Noviembre y San Isidro, que es la principal.
También están identificados en la colonia Sacramento y Alvaro Obregón, entre muchos otros.
Evitan pago de rastro
Menciona también el regidor, que al contratar un matancero les representa un ahorro, evitan el pago del rastro, pese a que va en contra de los reglamentos ecológicos y de salud.
Destacó Favela Escobedo que la matanza está fuera de toda norma, existen personas dedicadas a matar y no están autorizadas, venden sus servicios y se ofrecen a sacrificar estos animales en casas particulares.
?Representa un riesgo para la salud consumir este tipo de carne, se desconoce la procedencia del animal, si está en condiciones saludables y los métodos antihigiénicos con los que matan al producto. Algunos lo hacen en corrales de tierra y otros en patios encementados, pero eso no garantiza la limpieza, simplemente no hay control de la SSA o Salud Municipal?, concluyó.
Cumplen las normas
El administrador del rastro municipal, Carlos Calderón Cháirez, aseguró que el trabajo desarrollado en el inmueble cumple las normas higiénicas establecidas, para lo cual cuentan con un supervisor permanente que vigile la calidad de la carne.
Mencionó que en el presente mes han incrementado en algo la matanza, sobre todo de porcinos que va de 70 a 100 animales, por los cuales cobran cuarenta pesos, mientras que por la res cobran 110 pesos.
Dio a conocer que en la junta de directores hizo la petición de un malacate para los rieles que hace falta en el rastro, ya que por lo demás la fosa de sólidos trabaja bien.
Por último dijo que la Secretaría de Salud mantiene estrecha vigilancia de los animales que sacrifican para garantizar el consumo de la población.