01 de diciembre 2003
Bruselas, (EFE).- La OTAN creó hoy su primer Batallón multinacional de unos 500 efectivos militares para la defensa frente a ataques químicos, biológicos, radiológicos y nucleares (CBRN), que deberá estar plenamente operativo en julio del próximo año.
La iniciativa, lanzada por los ministros de Defensa de la OTAN en la reunión semestral que celebran hoy y mañana, martes, en Bruselas, tiene por objeto responder a las nuevas amenazas derivadas del uso de armas químicas, radiológicas, bacteriológicas y nucleares.
El secretario general de la OTAN, George Robertson, declaró que el Batallón es un "gran símbolo" de la renovación de la organización, que permitirá hacer frente a las "amenazas existentes, que tenemos que afrontar".
Robertson explicó que la ceremonia oficial del despliegue del Batallón tendrá lugar el 3 de diciembre en Praga (República Checa), ciudad donde estará basada la nueva unidad.
Entre otras operaciones, el Batallón llevará a cabo labores de reconocimiento, detección, control y supervisión de este tipo de amenazas.
Asimismo, permitirá reforzar la capacidad de la Alianza contra las armas de destrucción masiva, explicaron fuentes aliadas, que presentaron la iniciativa como un símbolo de la "transformación" de la OTAN y su manera de responder a las amenazas del siglo XXI.
Durante sus primeros seis meses de funcionamiento, la República Checa liderará la unidad, en la que participarán 500 efectivos de 15 países aliados, entre ellos España, explicaron las fuentes.
En particular, los soldados españoles estarán presentes en el cuartel general del Batallón, en las operaciones de reconocimiento nuclear y químico y en las de capacidad de descontaminación.
A continuación, Alemania asumirá el mando del Batallón, en una segunda fase en la que participarán 700 militares de 12 países.
Aunque el batallón tiene por objeto respaldar las operaciones de la Alianza, está asimismo diseñado para poder trabajar sólo o con otras unidades, precisaron las mismas fuentes.
Por su parte, el comandante checo Vratisvald Osvald, responsable de las fuerzas checas que liderarán los primeros seis meses de funcionamiento de esta iniciativa, opinó que la medida pone de relieve la "capacidad colectiva" de los países aliados, aspecto que garantizará el futuro de la OTAN, agregó.