Agencias
WASHINGTON, EU.- El cielo sobre los juerguistas de fin de año en Nueva York y otras ciudades de Estados Unidos quedará restringido para ciertas aeronaves y será patrullado por aviones de guerra, como parte de un plan contra posibles ataques terroristas, dijo ayer el Departamento de Seguridad Interna.
El Gobierno ha aprobado restricciones temporales de vuelo (RTV) sobre la franja hotelera y de casinos de Las Vegas, la zona de Times Square en la ciudad de Nueva York y el centro comercial de Chicago, según una portavoz del Departamento.
“Solicitamos permiso para RTV (...) sobre esas áreas para la víspera de Año Nuevo”, dijo la portavoz Rachael Sunbarger.
Las restricciones aplicarán a vuelos fletados y a aviones pequeños de recreo, pero no a las aerolíneas comerciales y a los vuelos militares, informó Sunbarger.
Asimismo, las restricciones estarán en vigor durante la mayor parte de los juegos de futbol americano, incluido el Rose Bowl en Pasadena, California, el día de Año Nuevo, y el desfile que los precede, según Sunbarger.
La zona de Times Square en Nueva York y el “Strip” en Las Vegas son dos de los sitios más populares para celebrar Año Nuevo.
El Departamento de Seguridad Interna aprobó las restricciones que son llevadas a la práctica por la Administración Federal de la Aviación. Estados Unidos ha culpado a la red Al Qaeda de Osama bin Laden por la muerte de casi tres mil personas en los ataques del 11 de septiembre de 2001, cuando aviones secuestrados se estrellaron contra el World Trade Center, en Nueva York, el Pentágono, en Washington, y en un campo en Pennsylvania.
El secretario de Seguridad Interna, Tom Ridge, que habló un día después de que su departamento ordenara a las aerolíneas extranjeras que colocaran alguaciles armados en determinados vuelos hacia y desde Estados Unidos, dijo que los aviones militares patrullarán los cielos estadounidenses.
Los vuelos sobre el centro de Chicago permanecen restringidos bajo un “código naranja RTV” desde el 24 de diciembre y ha habido restricciones sobre el espacio aéreo de Washington desde los ataques del 11 de septiembre de 2001.
Funcionarios de la ciudad de Nueva York, que espera que unas 750 mil personas se den cita en Times Square en las vísperas del Año Nuevo, dijo que esta sería una de las celebraciones más custodiadas de la historia.
“Sabemos que Nueva York permanece en la lista de objetivos terroristas y tenemos que mantenernos alertas”, dijo a la prensa el comisario Raymond Kelly de Nueva York.
El Departamento de Seguridad Interna, que el 21 de diciembre elevó la alerta terrorista a su segundo nivel, el naranja, dijo que seguía preocupada con el deseo de la red Al Qaeda de atacar a aerolíneas comerciales dentro del territorio estadounidense.
“Habrá seguridad en tierra, habrá seguridad en el aire”, dijo Ridge. El Gobierno ha impuesto con frecuencia restricciones de vuelo desde los ataques del 11 de septiembre, especialmente cuando el presidente George W. Bush visita ciudades principales de Estados Unidos. Medidas similares entraron en vigor en las celebraciones de fin de año 2002-2003 y el partido de futbol del Rose Bowl. Ridge dijo que el Gobierno seguía tan preocupado como cuando elevó el nivel de alerta de seguridad nacional a naranja hace nueve días.
CONFIRMA REINO UNIDO LA AMENAZA TERRORISTA
Dos días después de que Gran Bretaña destacara guardias armados en vuelos a Estados Unidos, las autoridades británicas recibieron información de inteligencia sobre amenazas generales a aviones de pasajeros en su país, dijeron funcionarios estadounidenses.
Las aerolíneas británicas fueron informadas sobre estas amenazas y algunas, entre ellas Virgin Atlantic Airways, comenzaron a volar con oficiales armados a bordo, aunque se desconoce con certeza cuándo adoptaron la modalidad.
La sede de Virgin Atlantic en Londres dijo que la empresa nunca hace comentarios sobre sus operaciones de seguridad.
El domingo pasado, la Secretaría de Asuntos Internos de Gran Bretaña dijo que destacaría guardias armados en algunos vuelos a Estados Unidos.
Al día siguiente, el Departamento de Seguridad Interna estadounidense comenzó a exigir a aerolíneas extranjeras que pusieran guardias armados en algunos vuelos hacia, desde o sobre Estados Unidos. Los vuelos que se nieguen a ello pueden ser denegados los derechos de tránsito sobre Estados Unidos.
El Gobierno británico anunció la medida un año atrás, pero no implementó la decisión hasta este fin de semana.
La amenaza no constituye la primera vez que el Gobierno británico ha recibido esa clase de información sobre sus aviones. En agosto, las autoridades cancelaron vuelos a Arabia Saudita debido a amenazas a vuelos con destino al reino islámico.
Un dispositivo especial de más de cuatro mil 500 agentes será desplegado hoy miércoles en París para reforzar la seguridad ante las supuestas amenazas de un atentado terrorista, informaron ayer las autoridades.
DECENAS DE SOLDADOS VIGILARÁN PARÍS
La Prefectura de París, encargada de la seguridad, dijo que el dispositivo de seguridad especial diseñado para la velada del último día del año incluye la vigilancia estrecha de la red ferroviaria de la región parisina en la que podrían haber sido colocadas bombas.
Añadió que decenas de soldados del Ejército galo formarán parte del contingente y las medidas de seguridad serán muy apreciables en la Avenida de los Campos Elíseos de la capital francesa donde se reunirán miles de personas para celebrar la llegada del nuevo año.
Las medidas “están a la altura” de la amenaza terrorista que pesa sobre Francia según las fuentes que descartaron que respondan a un efecto de psicosis.
La semana pasada, el Gobierno galo, accionista mayoritario de las aerolíneas Air France, anuló seis vuelos de la compañía con destino a Los Ángeles, California, a petición de las autoridades estadounidenses.
Según revelaron ayer medios locales, desde el pasado 23 de diciembre policías de élite embarcan en los vuelos entre París y ciudades de Estados Unidos susceptibles de ser blanco de un posible atentado terrorista.
CIERRAN EMBAJADA INGLESA EN PERÚ ANTE EL TEMOR
El Gobierno del Reino Unido dispuso el cierre temporal a partir de ayer de su embajada en Perú ante posibles ataques terroristas, informó una fuente diplomática.
Un vocero de la representación diplomática británica, citado por la prensa peruana, indicó que la medida se prolongará por tres días y responde a razones de seguridad.
Una llamada telefónica anónima que amenazó con la detonación de una bomba en la legación inglesa causó gran alarma, y fuentes diplomáticas no descartaron que haya sido el grupo rebelde Sendero Luminoso.
Sin embargo, agentes de la Unidad de Desactivación de Explosivos de la Policía Nacional (UDEX) que acudieron a inspeccionar el local diplomático, ubicado en el exclusivo distrito de Miraflores, comprobaron que se trató de una falsa alarma.
Ante el nerviosismo la Oficina del Exterior del Reino Unido, advirtió a sus ciudadanos que visitan Perú sobre la violencia callejera en Lima y Cusco, por lo que recomendó estar atentos cuando visiten lugares de esparcimiento.
BRASIL CRITICA EXIGENCIAS COMO “BRUTALES Y XENÓFOBAS”
Un juez federal brasileño dispuso que todos los ciudadanos estadounidenses que ingresen a Brasil desde el primero de enero sean fotografiados y las autoridades tomen muestras de sus huellas dactilares.
“Mientras perdure la restricción impuesta por las autoridades estadounidenses, determino que se fotografíe y se recojan las impresiones dactilares de los nacionales de Estados Unidos de América en los puertos, aeropuertos y carreteras cuando ingresen a territorio brasileño”, indicó el juez Julier Sebastiao da Silva en un fallo divulgado ayer.
Estados Unidos comenzará en enero a verificar la identidad de millones de visitantes extranjeros que ingresan al país por medio de fotos y huellas dactilares como forma de mejorar su seguridad.
Por su parte, el presidente brasileño Luiz Inácio lula da Silva, indicó que “cabe a Brasil celar por la aplicación de los principios constitucionales de dignidad de la persona humana y de la reciprocidad en sus relaciones internacionales”.
El magistrado agregó que “obviamente que los ciudadanos europeos y de otros países ricos no serán objeto del acto ultrajante, que será reservado a los nacionales de países pobres de América Latina, África, Oriente Medio y Asia”.
Además, calificó a la exigencia estadounidense como un hecho “brutal (...), xenófobo y digno de los peores horrores patrocinados por los nazis”.