No logran acuerdo autoridades de Coahuila y la CNA
SALTILLO, Coah.- El gobierno del estado y las autoridades municipales de Juárez y los habitantes de este alejado municipio, pelean hasta el último minuto su agua; la de la presa Venustiano Carrranza o “Don Martín”, como le dicen de cariño los lugareños. Hasta ayer no había acuerdos en las conversaciones a puerta cerrada entre funcionarios estatales y representantes de la Comisión Nacional del Agua (CNA), en cuanto la cantidad que pudiera trasvasarse a la presa Salinillas en el vecino estado de Nuevo León, “para el consumo humano —según se dijo— de más de 20 mil personas de Anáhuac”.
En tanto, en los alrededores de la presa, cuatro patrullas y 12 elementos de la policía estatal se mantienen alertas en la presa “Don Martín”, a fin de evitar enfrentamientos entre habitantes y campesinos de Juárez y funcionarios de la CNA, que son vistos como “intrusos”, quienes son los encargados de abrir las compuertas para el trasvase del preciado líquido.
“Hemos pedido a nombre del gobierno del estado de Coahuila, que revisemos los términos de la extracción de más de 14 millones de metros cúbicos de agua, que se piden para uso doméstico de los habitantes de Anáhuac, porque para nosotros esa cantidad va más allá de las expectativas que nos habíamos trazado, van muy por encima de la cantidad que se había manifestado anteriormente”, expresó el secretario de gobierno Raúl Sifuentes Guerrero, al término de la reunión que sostuvo por horas con funcionarios de la CNA.
El secretario de Gobierno, dijo que Coahuila pidió que se reconsidere esa cantidad solicitada para el trasvase, que ojalá sea menor y que en verdad se destine para el consumo humano, porque la presa apenas tiene el dos o tres por ciento de los más de mil 300 millones de metros cúbicos que puede almacenar.
“Nuestra postura es de estricta defensa de los intereses de los coahuilenses, pero tiene que ser una posición que entienda y que comprenda que hay una necesidad extrema, de una población del estado de Nuevo León”, asentó el secretario de Gobierno.
Hasta la última gota
Por su parte, el director de Cuencas del Norte de la CNA, José Luis Adame de Léon, uno de los participantes en la reunión, dijo que es necesario el trasvase del agua de Coahuila a Nuevo León, en virtud de que es para el consumo humano de los pobladores de Anáhuac.
Aseguró que en caso de que tuviera que sacarse toda el agua y que la presa quedara totalmente vacía, no sufriría ningún daño en su estructura física, porque fue construida para evitar esa eventualidad.
Vigilancia
En tanto, desde hace más de una semana el gobierno del estado envió a los alrededores de la presa conocida como “Don Martín” a cuatro patrullas y una docena de policías estatales, para evitar enfrentamientos entre los vecinos de Juárez y funcionarios de la CNA, ante el temor de que pudieran ser linchados.
“Según el decir de habitantes del poblado de Juárez, se corrió el rumor de que podría venir gente de Anáhuac a abrir las compuertas y sacar el agua por la fuerza”, comentó una fuente anónima de Seguridad Pública.
En el año 2001, cuando la CNA trasvasó más de 200 millones de metros cúbicos de agua de “Don Martín”, para enviarla a Texas como parte del adeudo con los Estados Unidos, los vecinos de Juárez cerraron las compuertas de la presa, y ante el temor de que pudieran ser agredidos por habitantes de Anáhuac o por policías federales, el gobierno del estado mandó a patrullar a sus agentes estatales.
Mientras se llevan a cabo las conversaciones entre el gobierno estatal y el Gobierno Federal, el senador del PAN, Luis Rico Samaniego, aseguró en entrevista aparte que la CNA cometería un grave error si autoriza el trasvase de los 14 millones de metros cúbicos de agua a la presa Salinillas.