La corrupción es un grave problema al que se le trata de hacer frente pero no es combatido con suficiente impacto tanto por las autoridades como por la ciudadanía, opinó el Centro Empresarial de Durango.
La dirigencia de Coparmex en la entidad considera que la cultura de la opacidad y la falta de una verdadera rendición de cuentas a la sociedad son algunos de los factores por los que se generaliza la percepción de que la corrupción no disminuye sino, por el contrario, se incrementa.
Gilberto Sánchez Rodríguez, líder patronal en Durango, dijo: “La corrupción ha lacerado tanto a la sociedad y ha hecho que se generen graves problemas, como el desempleo, por ejemplo, porque las empresas formales que cumplen con todos los requisitos de ley no pueden competir con todas aquellas negociaciones que evaden al fisco y ofrecen productos de la ‘piratería’ o el contrabando. Eso también es corrupción”.
Sánchez Rodríguez fue tajante al reconocer que contra la corrupción existe un combate que no se ha ganado, lo que, a pesar de no ser débil, ha facilitado que se incremente el problema.
A todos nos atañe resolver paulatinamente las corruptelas –precisó Sánchez-. Luego acentuó que hay varios aspectos pendientes que le corresponde remediar específicamente a las autoridades, como es el caso de la rendición de cuentas de lo que hacen con los recursos que recaban de la sociedad.
“Lo que deben hacer los gobiernos, como mínimo, es decirnos con precisión y continuidad qué hacen con nuestros recursos. La transparencia en la administración pública es necesaria para el empresariado, ya que con la información oportuna se pueden tomar decisiones, se puede pensar o descartar una inversión, etcétera”.
Gilberto Sánchez reiteró que es la ciudadanía otro factor de suma importancia para poder hacerle frente de verdad a la corrupción en Durango, ya que es necesaria su participación desde la formulación de denuncias públicas contra funcionarios que estén incurriendo en irregularidades, hasta la no intervención, mucho menos propiciar ese tipo de hechos que van en detrimento de todos.
Celo y opacidad
Información pública
Diferentes sectores de profesionistas y del empresariado han criticado ante este medio escrito el hecho de que hay funcionarios de los tres niveles de gobierno que creen en Durango que la información en su poder es patrimonio del Estado, lo cual, señalan los críticos, no es así.
Al considerar como algo sagrado la información pública, dificultan la transparencia y el acceso de la opinión pública a temas de relevancia para la sociedad, mismos que no se conocen a detalle por el celo con que son guardados por la autoridad los datos en ese sentido.