Reuters
SEÚL, COREA DEL SUR.- Funcionarios de Estados Unidos anunciaron la reanudación de los vuelos espías cerca de Corea del Norte y que ese país tardará meses en fabricar bombas nucleares, mientras un informe japonés dijo ayer que Pyongyang lanzará pronto un misil balístico.
Con Estados Unidos preocupado con una posible guerra con Iraq, Pyongyang ha mantenido una retórica beligerante y acciones provocativas para presionar a conversaciones directas con Washington para solucionar una crisis por dos presuntos programas de armas nucleares de Corea del Norte.
“Buscamos la paz, pero no imploramos por la paz como un esclavo ante las demandas de desarme”, dijo la radio estatal de Corea del Norte.
Funcionarios estadounidenses dijeron el miércoles que los vuelos de reconocimiento en el espacio aéreo internacional cerca de Corea del Norte se reanudarán tras una interrupción causada por la intercepción de una de estas naves carentes de armamento.
Los funcionarios no aclararon si los vuelos de los aviones espías RC-135 habían ya comenzado, pero dijeron que había planes de hacerlo. Cuatro aviones MiG de Corea del Norte volaron muy cerca de uno de estos aviones el dos de marzo a unos 240 kilómetros de las costas de Corea del Norte.
Estados Unidos presentó una protesta oficial por el incidente, que según el periódico New York Times fue un intento de Corea del Norte de forzar a aterrizar el RC-135 y capturar a su tripulación.
El anuncio tuvo lugar en un momento en que las tensiones se han incrementado en la Península de Corea desde que funcionarios estadounidenses dijeron en octubre que Corea del Norte había admitido enriquecer uranio.
“Es muy urgente encontrar una solución al tema nuclear de Corea del Norte”, dijo el presidente sudcoreano Roh Moo-hyun en un discurso en una academia de cadetes navales. “Otra guerra reduciría a cenizas nuestra prosperidad en un momento”.
En otra señal de la amenaza potencial de Pyongyang para sus vecinos, un periódico japonés reportó el jueves que Corea del Norte podría estar a punto de lanzar un misil balístico Rodong de mediano alcance, capaz de alcanzar todos los puntos de Japón.
El diario Yomiuri Shimbun citó a fuentes del gobierno que dijeron que vehículos militares se habían congregado alrededor de varios sitios de lanzamiento, pero aún no se había determinado si Corea del Norte había comenzado a llenar de combustible los misiles.