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LA PAZ, BOLIVIA.- La tensión social aumentó ayer en Bolivia ante la marcha que miles de personas protagonizaron en esta ciudad, en el marco de un paro nacional convocado por trabajadores para exigir la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada.
Comerciantes, campesinos, estudiantes y obreros caminaron por las principales calles céntricas de La Paz, en el inicio de una serie de movilizaciones convocadas por la Central Obrera Boliviana (COB) para demandar la dimisión del mandatario boliviano.
Los manifestantes portaban pancartas y gritaban consignas como "Hay que cuidar el gas, es el futuro de los niños bolivianos", "Si Goni (Sánchez de Lozada) quiere plata, que venda a su mujer" y "El pueblo unido jamás será vencido".
Las protestas se intensificaron ayer con el inicio de una huelga general, ante la falta de acuerdo respecto a las demandas que realizaron al gobierno tanto la COB como la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB).
Los campesinos y trabajadores se movilizan desde la semana pasada para exigir que la exportación del gas a Estados Unidos y México contemple su procesamiento en este país sudamericano, lo cual permitiría generar puestos de trabajo y mayor riqueza a Bolivia.
Algunos marchistas expresaron ayer su temor a que se repita la historia de la plata y el estaño, recursos naturales que generaron grandes fortunas y bienestar para otros países, pero que no aportaron nada a la nación sudamericana.
Pese a la masiva convocatoria que obtuvo la marcha en La Paz, el portavoz presidencial Mauricio Antezana restó importancia a la manifestación e indicó que las protestas tienen un trasfondo político, pues buscan desestabilizar al actual gobierno.
El viceministro de Trabajo, Guido Meruvia, aseguró de su lado que la huelga de la COB se trata de un movimiento político, por lo cual a su juicio no tendrá el respaldo esperado y advirtió que se aplicarán las sanciones correspondientes.
El funcionario también descalificó al principal dirigente de la COB, Jaime Solares, al indicar que no es legítima su dirección por los muchos cuestionamientos que existen en su contra.
Además de la marcha por el centro de La Paz, ayer se desarrolló un paro cívico en la ciudad de El Alto en apoyo a la CSUTCB, movimiento dirigido por el diputado indígena Felipe Quispe, y en defensa del gas del yacimiento de Tarija.
Solares, secretario ejecutivo de la COB, afirmó en tanto que si el gobierno del presidente Sánchez de Lozada no atiende las demandas de los distintos sectores, habrá "convulsión social".
La CSUTCB aseguró de su lado que no existe voluntad política de la administración gubernamental para solucionar los problemas sociales del país sudamericano.