POR CRISTAL BARRIENTOS TORRES
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Cualquier arteria de la ciudad. Los colores: verde, blanco y rojo. En el mes de la patria decenas de personas llegan a Torreón para vender algo más que un producto: la Bandera de México para venerarla.
Braulio Miguel Jiménez Esquina la ha hecho de todo un poco: obrero, albañil y vendedor ambulante. Desde hace dos semanas llegó a Torreón procedente de Toluca, Estado de México.
Sólo estará en la ciudad 30 días. Así lo establece su contrato como agente de ventas. En este tiempo tratará de ofrecer algo más que un producto a los laguneros. Dice que venerar la Bandera es algo que pocos hacen.
Braulio fue conscripto militar. Ahí, en el ejército, le enseñaron a querer por sobre todas las cosas a la Bandera de México “como si fuera una madre”. Asegura que en todo el territorio nacional debe estar este símbolo.
Por el momento vive en una vecindad de Torreón. El patrón le paga renta, comida, menos los gustos personales. “Si quiero una fruta, ésa la compro yo, si se me antoja otra cosa también la debo comprar con mi dinero”.
Todos los días permanece más de ocho horas en las calles. Asegura que el calor de Torreón en ocasiones es insoportable. “En Toluca dormimos con cobijas, aquí no, allá el maíz está jiloteando, todo está muy verde”.
Si las banderas no se venden para el 16 de septiembre, se quedarán en las cajas hasta el próximo año.
Recorrer las calles, dice, es duro porque el sol cala fuerte y al final del día se quita los zapatos en cuanto puede porque termina con los pies hinchados. Braulio extraña su familia, la lluvia y el frío de Toluca.
A sus 58 años se enorgullece de sí mismo. De pequeño prefirió el trabajo que la escuela. Su situación económica no le dejó otra opción. Y ante la necesidad de cobrar y dar el cambio, decidió darse valor y cursar la primaria, después concluyó la secundaria.
Quiso estudiar porque comprendió que los centavos se hacen pesos y por eso no hay que despreciar-los. Además considera importante saber sumar, restar, multiplicar, también dividir. La escuela además de ayudarle a recuperar su niñez, le enseñó a amar a la Bandera de México.
Símbolo
La Bandera y el Escudo Nacional, simbolizan la patria y la nacionalidad mexicana. El escudo tiene su origen en el jeroglífico de la fundación de la gran Tenochtitlán. Está compuesto por tres elementos: el águila, el nopal y la roca. Fue hasta el siglo XVI cuando los españoles introdujeron la serpiente.
El águila representa la fuerza cósmica del sol, el nopal el paisaje del Valle de Anáhuac y la serpiente las potencialidades de la tierra. Con algunas variantes el águila sobre el nopal fue utilizada durante mucho tiempo. A fines del siglo XVIII se le agregaron ramas de encino y laurel.
Fue hasta 1824 cuando se le conformó con todos sus elementos. Antes de la forma definitiva de la Bandera, hubieron otros símbolos que significaron la lucha de los mexicanos.
Hasta el cinco de febrero de 1934 en el que se conservó el águila de perfil, se utilizó su plumaje y se rectificó la posición de la serpiente. A partir de entonces su diseño fue declarado como oficial y único como emblema nacional.
La Bandera Nacional consiste en un rectángulo dividido en tres franjas verticales de medidas idénticas. La primera de ellas es verde, la central blanca y la última roja.