Agencias
CIUDAD DE GAZA.- Tres militantes palestinos y diez civiles murieron y otras 70 personas resultaron heridas en el ataque aéreo efectuado por Israel ayer contra el campo de refugiados de Nuseirat en el centro de la franja de Gaza, dijeron fuentes médicas.
Testigos presenciales dijeron que el dirigente local del Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas), Imad Akel, y otros dos militantes se encontraban en el interior del vehículo blanco del ataque y agregaron que murieron en el acto.
En ese momento decenas de personas se concentraron alrededor del vehículo para tratar de rescatar los cuerpos calcinados cuando dos misiles lanzados por helicópteros israelíes impactaron en la zona dejando a 70 personas heridas.
Fuentes médicas del hospital Al Aqsa en el centro de la franja de Gaza dijeron que al menos trece personas murieron en total en este ataque y 70 fueron heridas, 15 de las cuales se encuentran en condiciones críticas.
Centenares de personas se concentraron en las calles del campo de refugiados atacado y clamaron gritos de venganza y llamados de una repuesta inmediata a las agresiones israelíes.
Se trata del quinto ataque aéreo de la ofensiva israelí lanzado ayer, contra instalaciones y objetivos del Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas) y que, según fuentes israelíes, es la respuesta al lanzamiento realizado el domingo de ocho cohetes contra territorio israelí desde la franja de Gaza.
El ataque de ayer era el quinto de la jornada y antes el Ejército ya había atacado instalaciones y objetivos de Hamas en los barrios de Sheij Raduán, Sayaíe y otras zonas en las afueras de la ciudad de Gaza.
En esos ataques murieron dos activistas de Hamas que viajaban en un coche, un conductor que pasaba junto a ellos y al menos 70 personas resultaron heridas de diversa consideración.
Otro ataque letal fue el realizado por un avión F-16 que bombardeó un edificio en el que según el ejército de Israel se fabricaban armas.
El edificio afectado estaba junto a la casa de un líder de alto rango del movimiento radical Yihad Islámica. Por lo menos 14 personas, incluyendo cuatro mujeres y cuatro niños, resultaron heridas por la metralla en el ataque contra el edificio, aunque ningún caso era de gravedad, según testigos.
“De repente escuchamos una gran explosión y fue como un terremoto, todo comenzó a caernos encima, vidrio, escombros”, dijo Rawad al-Jamal, cuyos hijos resultaron heridos en el ataque.
El ejército dijo que el edificio era utilizado como un taller por el grupo de militantes Hamas para fabricar cohetes Qassam y otras armas utilizadas contra Israel en un levantamiento que comenzó hace tres años por la creación de un estado palestino.
El misil destruyó un edificio de dos pisos que no estaba habitado, localizado junto a la casa de Shami en un barrio de la Ciudad de Gaza.
Fuentes palestinas indicaron que el edificio era de propiedad de una familia con vínculos cercanos a Hamas.
Un portavoz del ejército negó que Shami fuera el objetivo del ataque que, dijo, era contra “un taller de Hamas utilizado para fabricar armas. “La fábrica de armas se encuentra en un edificio junto a la casa de Shami”, dijo el portavoz.
El primer ministro palestino, Ahmed Korei 0(Abú Alá) ha condenado severamente estos ataques y ha llamado a la comunidad internacional para que intervenga de inmediato para cesar las agresiones israelíes.
En un comunicado de prensa el Ejército israelí confirmó ayer que la intención de estos ataques es mermar al capacidad ofensiva de Hamas después del lanzamiento del domingo, de ocho cohetes “Kasam” contra el territorio israelí, tres de los cuales cayeron en Sderot.
Por su parte el primer ministro israelí, Ariel Sharon, dijo ayer en el Parlamento que las acciones de se producen tras los “sangrientos sucesos” llevados a cabo por los palestinos contra objetivos israelíes y responsabilizó a Yasser Arafat de ser el “principal obstáculo para la paz” en la región.
“Los terroristas no tendrán ningún santuario”, dijo Raanan Gissin, asesor del primer ministro israelí, Ariel Sharon.
Analistas israelíes destacaban que los cinco bombardeos de ayer en Gaza suponen la mayor ofensiva aérea contra blancos palestinos en esa zona autónoma.