No son pocos quienes piensan que gastar mucho en ropa es una frivolidad, mientras que otros piensan que deben gastar lo más posible, con lo que complican toda su situación financiera global. Aquí, las claves para gastar exactamente lo justo.
Tenga o no mucho dinero para gastar, existen alguna maneras de calcular cuánto destinar de su presupuesto total a la compra de su vestimenta.
El método histórico: Si usted lleva una cuenta detallada de todos sus gastos, a mano o por computadora, generalmente podrá encontrar este ejercicio como un esfuerzo muy pequeño. Simplemente marque la cantidad de dinero que ha gastado anualmente durante los últimos años y luego compare uno con el otro.
Si sus hábitos de gasto son bastante predecibles, las cantidades serán probablemente similares en cada año. Si ha experimentado un cambio de trabajo que afectó a su guardarropas, o por ejemplo, tuvo un chico que se convirtió en adolescente, considere que impacto tuvieron estos factores en su historial de gastos de ropa.
Simplemente determine que impacto pudo llegar a tener este cambio (como afectó su economía hogareña, por cuento tiempo) y ajuste su presupuesto para la ropa a este calculo. Si el monto le parece algo alto o bajo en proporción con el resto de sus ingresos y gastos, puede que necesite ajustar sus hábitos de consumo para satisfacer sus objetivos de compra.
El método del porcentaje: Aquellos que no suelen guardar un registro de sus ingresos y gastos, o bien quiénes desean un cálculo que les dé una respuesta más precisa, pueden utilizar el método del porcentaje.
El método de porcentaje sirve para destinar un porcentaje fijo de sus ganancias para los gastos específicos. Como estas cifras pueden variar bruscamente dependiendo de su situación particular (independiente, empleado, casado, soltero, etc.), utilice estos márgenes sólo como guías de consulta para formar su presupuesto, y luego ajuste lo necesario a su situación determinada.