Por Eunice Martínez Arias
El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Desde que murió el hijo de Carmelita, los diez de mayo no son iguales. Su recuerdo la invade durante todo el día, no puede quitar de su mente los momentos que vivieron juntos.
Ludwika es el contraste; es joven y hace poco tiempo tuvo a su primer hijo. Al hablar de su pequeño Nicolás su vocabulario queda corto para describir la maravillosa experiencia que vivió al convertirse en mamá. Es feliz, muy feliz.
Pero la señora Ofelia no se queda atrás. A sus 81 años asegura estar orgullosa de sus cuatro retoños. Su madre la ayudó a cuidarlos... la admira muchísimo.
Sí, la historia de estas tres mujeres es un vivo ejemplo de lo que ríen y lloran diariamente las madres de este país. Ellas, al igual que todas, han estado junto a la cama de sus hijos cuando están enfermos, han ido al parque para verlos jugar y los reprimen cuando lo necesitan.
Carmen Salinas, Ludwika Paleta y Ofelia Guilmain, además de grandes actrices son mujeres y madres, y hoy, están celebrando su día... ¡Feliz Día de las Madres!
Una experiencia maravillosa
Siempre había escuchado que ser madre era una gran bendición, por eso, Ludwika anhelaba tanto tener un hijo. Fue a los 20 años cuando se enteró de la gran noticia ¡estaba embarazada!
-¿Por qué dicen que tener un hijo es la experiencia más maravillosa que puede tener una mujer? “Porque hasta que tienes un hijo, sabes que eres capaz de hacer todo por una persona y la capacidad tan grande que tienes de amarla. El amor que se siente hacia un hijo no es egoísta, es tan puro y tan especial, que sólo se puede experimentar si eres madre”.
Su voz es pausada, cada una de sus palabras le nacen del alma, definitivamente no se comportó “sangrona” ni grosera, como han mencionado en repetidas ocasiones en diferentes medios de comunicación.
Sin exaltarse cuenta que su parto fue complicado; el niño apenas había cumplido ocho meses de gestación cuando tuvieron que hacerle cesárea. Un día antes de la intervención comenzó a sangrar un poco, pero el médico únicamente le pidió que reposara. “No sentía que se moviera Nicolás, y cuando le comenté al doctor me dijo que me diera un masaje y que de inmediato se iba a mover el bebé, ¡pero no lo hizo! Al día siguiente fui al hospital para que me hicieran un ultrasonido y resultó que ya no tenía líquido amniótico, entonces me hicieron una cesárea de emergencia”, explicó.
Definitivamente ella y su esposo -el también actor Plutarco Haza- se llevaron un susto, pero todo salió bien, y ahora están sumamente felices con el pequeño.
Gracias a la maternidad, Ludwika Paleta -una de las protagonistas del melodrama Niña Amada Mía- ha aprendido a amar, a divertirse, a valorar cada momento de su vida, pero sobre todo, a entender que las cosas vienen y van, menos el amor que le tienes a tu familia.
Una madre “formidable”
Cuando Ofelia Guilmain estaba en los foros grabando telenovelas o películas, tenía la tranquilidad de que sus cuatro hijos estaban en buenas manos: las de su madre.
“Tuve la enorme satisfacción de tenerla conmigo, fue ella quien me ayudó a criar y a atender a mis cuatro niños, de manera que nunca nos faltó nada ni a ellos ni a mí”, dijo con su ronca voz.
Varias décadas la separan de aquellos tiempos. Actualmente la madre de Juan Ferrara tiene 81 años, su familia ya no consta únicamente de sus hijos, ya tiene nietos, bisnietos y un sin fin de historias que contar.
“Mi madre se llamaba Aurora, era una mujer extraordinaria, culta, excepcional... además era guapísima y muy educada, tenía dos carreras. Siempre la admiré y la sigo admirando mucho. Todos los recuerdos que tengo de ella son felices”.
-¿Cree que la educación que le daban las mamás de antes a sus hijos, era mejor que la que dan las madres de hoy? “No he notado gran cambio, pero la que es buena madre sigue educando a sus hijos lo mismo”.
Al preguntarle sobre sus “retoños”, la señora Guilmain no puede ocultar el orgullo que siente por ellos. Aseguró que están llenos de valores, “son gente honrada, positiva, muy simpáticos y muy buenos trabajadores -casi todos trabajan en la misma profesión que yo-. La verdad, son mi orgullo”.
Para esta experimentada actriz, el mejor regalo que puede recibir este diez de mayo, es que toda su familia esté bien... “eso es lo más importante”.
El dolor más grande
Son los contrastes de la vida. Carmen Salinas tuvo que grabar “muy contenta” el programa especial de Televisa dedicado a las madrecitas, mientras por dentro, su dolor se hacía más grande y profundo.
Desde 1994, el día de las madres dejó de celebrarse en su casa. El 19 de abril de ese año murió a causa de cáncer Pedro Plasencia, quien fuera director musical de un sin fin de emisiones de la empresa de Emilio Azcárraga e hijo de Carmelita, una de las actrices más queridas de México.
-¿Mañana cómo va a festejarse? “Yo no me festejo desde que murió mi hijo. Ese día se acabó para mí la mitad del diez de mayo. Será un día muy triste, pero no creo que solamente para mí, sino para quienes hemos tenido la desgracia de perder un hijo”, expresó sumamente cansada y deprimida.
Ha sido tan grande el dolor de la pérdida, que la lagunera se refugió en la oración para mitigarlo. Diariamente reza el rosario, de esa manera se ayuda un poco y también a su hijo. Además, no hay fin de semana que deje de ir al panteón.
“Lo recuerdo todos los días, pero en estas fechas se me carga más, sobre todo cuando va a ser su cumpleaños, su aniversario de fallecido, el diez de mayo y... (hace una pausa), todos los días. Cada segundo pienso en él. Definitivamente el mejor regalo que podría tener mañana (hoy) y toda la vida, es que mi hijo estuviera vivo”.
Con todo y su tristeza, Carmen Salinas envió un beso a todas las madrecitas de La Laguna –su tierra- particularmente a sus hermanas, cuñadas y toda su familia.
Orígenes de la festividad
Alrededor de todo el mundo se celebra en el mes de mayo, el Día de las Madres. Pero, ¿cuándo y por qué surgió esta tradición?
-Las primeras celebraciones por el Día de las Madres se iniciaron en la Grecia Antigua, en las festividades en honor a Rhea, la madre de Júpiter, Neptuno y Plutón. Durante el siglo XVII, en Inglaterra, surgió el día "Domingo de Servir a la Madre" en la cual se honraba a las madres de ese país.
-En 1905, una mujer estadounidense llamada Ana Jarvis, luego de la muerte de su madre decidió escribir a maestros, religiosos, políticos, abogados y otras personalidades de su país, para que la apoyaran en su proyecto de celebrar el "Día de la Madre". El día escogido fue el segundo domingo de Mayo, aniversario de la muerte de su propia mamá.
-Al ver la gran acogida a su iniciativa, la joven logró que el Congreso de los Estados Unidos presentara un proyecto de ley a favor de la celebración de este día en la Unión Americana. En 1914, el Presidente Woodrow Wilson firmó la petición que proclamaba el Día de la Madre como día de fiesta nacional.
-La iniciativa se fue extendiendo a lo largo de todo el mundo en los años posteriores, logrando que 40 países de diferentes latitudes (incluyendo México), se unieran a la emotiva idea de rendir homenaje y enaltecer a las madres.
FUENTE: Agencias