El gerente estatal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Miguel Ángel Calderón Arámbula, informó que en poblaciones donde las inundaciones afectaron infraestructura hidráulica, como lagunas de oxidaciones y redes de agua potable y alcantarillado, se realizan acciones de saneamiento en coordinación con el sector salud, JEAPA y Sideapa, a fin de disminuir los riesgos de consumir agua no potable.
En el contexto de la evaluación de los daños ocasionados por las inundaciones, el funcionario admitió que hay poblaciones de los municipios de Durango como Bayacora, Francisco Villa Viejo y Villa Nuevo, El Arenal, entre otros, Pueblo Nuevo, Poanas, Canatlán, Nazas, en donde sigue el estado de emergencia, no solamente por afectaciones en viviendas, caminos, puentes y escuelas, sino por los riesgos de que se consuma agua no apta para el consumo humano, a consecuencia de los desperfectos en la tubería de agua potable y alcantarillado, y filtraciones de algunas lagunas de oxidación.
Dijo que además de aplicarse la plata coloidal y el cloro, se reparte agua embotellada entre la población afectada, todo en coordinación con la Secretaría de Salud, los ayuntamientos, JEAPA y Sideapas.
Con relación a la evaluación de los daños, informó que en el caso de la infraestructura hidráulica, que es la parte de la que es corresponsable Conagua, junto con la Junta Estatal y el Sistema Descentralizado, informó que se lleva un avance de 80 por ciento en lo que se refiere al aspecto físico, mientras que en el renglón económico aún no se ha cuantificado, esperándose que cuando esté en Durango el representante de la Secretaría de Gobernación ya se tenga todo definido, a fin de que se agilice la liberación de los recursos del Fondo Nacional de Desastres Naturales para los 16 municipios declarados como tales.
Explicó que hay preocupación por las repercusiones, en la salud sobre todo, que pudieran traer consigo los daños en la infraestructura hidráulica que sirve para dotar de agua potable a las comunidades, pero también en lo que se refiere al tratamiento de aguas negras, ya que en ambos casos, de no aplicarse medidas contundentes, aparejadas con sanitarias, pueden generarse afectaciones a los habitantes.
Señaló que en los 16 municipios que se declararon como zona de desastre hay daños en infraestructura hidráulica, aunque admitió que en algunos puede considerarse como ?focos rojos?, como son los poblados de Bayacora, Francisco Villa Viejo y Villa Nuevo, El Arenal, o en Nazas, Súchil y Vicente Guerrero, entre otros. Inclusive en este último, en la comunidad de Graceros, la situación es calificada de difícil.