El sentido común
¿Cómo describirlo de la manera más sencilla?
Una de las definiciones, la más simple puede ser ésa de tener un sentido propio de la comunidad, o sea comprendiendo el sentir de todos, caracterizado por un buen juicio.
Es algo sencillo pues, y sin embargo tan ajeno a mucha gente.
El sentido común lo requiere mucho el maestro, el jefe, el funcionario público entre otros.
Y es que el sentido común no está en venta en las boticas ni se enseña en las escuelas, pues es algo innato, propio de cada quien.
El sentido común es el que pone las bases en el buen vivir de muchas gentes, otorgándoles la plataforma de su éxito, y cuando falta, de sus fracasos.
La enseñanza de muchas carreras profesionales, apelan al buen sentido común de los estudiantes, para que con el correr del tiempo éstos llenen los vacíos que puedan quedar con su sentido común, gracias a la forma personal de comportarse o de actuar en cada caso.
Parece sin importancia el tema, y sin embargo es de lo más trascendente.
¿Y la pregunta importante es, cómo se adquiere un buen sentido común?
Esta cualidad viene ya acompañando a cada quien y se da sobre todo en personas sensatas, prudentes, de buen juicio.
Muchas de ellas quizá no tengan amplios estudios y quizá no hayan asistido a clases en universidades, pero su sano juicio es reconocido por la sabiduría de sus decisiones.
Y las personas de gran sentido común son sobre todo aquéllas que poseen personalidad, carácter, y cualidades para actuar por sí mismas.
Grandes maestras de la humanidad son muchísimas madres, quienes no sólo con su cariño y sus cuidados van otorgando lecciones invaluables a sus hijos, para decidir bien y sin titubeos.
Desde que lo toman de la mano para llevarlo por el mejor camino le van mostrando los mejores espacios y luego vendrán las mejores decisiones en cada caso, todas acompañadas de mucho sentido común.
En un hogar, donde haya cariño y mucho respeto entre sus miembros, los niños tendrán mejores bases para crear una formación más positiva, sabiendo escoger lo conducente en cada etapa.
El sentido común lo requieren los que guían destinos de familias, empresas o pueblos.