Un hombre y una mujer estaban en cierto restorán. De pronto el hombre se metió a toda prisa abajo de la mesa y se ocultó tras el mantel. La señora pareció no darse cuenta de eso y siguió comiendo como si nada. Acude el capitán de meseros, asombrado, y dice a la señora: "-Disculpe, pero ¿sabe usted que su marido está abajo de la mesa?". "-No -replica la mujer-. Mi marido es aquel señor que acaba de entrar"... Pepito le dice a su abuelo: "-Ya te puse un clavito en la pared, abuelito". "-¿Un clavito?" -se extraña el anciano-. ¿Por qué un clavito?". Explica el niño: "-Es que dice mi mamá que cuando cuelgues los tenis podremos ir a Disneylandia"..."-¡Pero, doctor! -protesta el paciente del traumatólogo-. ¿5 mil pesos, nada más por enyesarme el brazo?". "-¿Y qué quiere? -replica el facultativo con enojo-. ¿Que además se lo entapice?"... "Soy hombre de una sola palabra: rájome". Así decía un individuo que no estimaba en mucho la propia integridad. Proverbio de rancheros enseña que al buey se le conoce por la encornadura y al varón por la palabra. En la sierra de Arteaga, bello lugar cercano a mi Saltillo, usan los campesinos montañeses rematar sus tratos arrancándose un pelo de la barba y entregándolo a aquel con quien trataron. De ese modo quieren significar: "Soy hombre, pues que tengo barba. Mi hombría responderá por mí". Este antiguo uso no entraña machismo ni arrogancia, sino conciencia de lo que se debe a la verdad y a la honradez. Ahora hay quienes piden renegociar el TLC, o denunciarlo para apartarnos de él. No son aplicables al caso, desde luego, los puntillos de honra que arriba describí. Ya se sabe que cuando una dama dice "no", eso significa "quizá", cuando dice "quizá" eso significa "sí", y cuando dice "sí" eso significa que no es una dama. En el caso de un diplomático, cuando dice "sí" eso significa "quizá", cuando dice "quizá" eso significa "no", y cuando dice "no" eso significa que no es un diplomático. Lo que debemos hacer en relación con el TLC no es buscar renegociarlo, sino ponernos a su altura. Eso implica un esfuerzo de moderniza-ción; renunciar a esquemas obsoletos -la parcelación extremada de la tierra es uno de ellos- y admitir la presencia de capitales en el campo que permitan su cultivo, extensivo e intensivo, y el aprovechamiento agroindustrial de sus productos. Así se dará empleo a los campesinos que hoy por hoy deben buscar en las ciudades el sustento, o de plano arriesgar hasta la vida para ir "al otro lado". El problema es complejo, lo reconozco, y de seguro no seré yo quien le hallará definitiva solución. Espero, sin embargo, haber puesto sobre la pista a los expertos. Quien quiera mayor información deje recado y el número de su teléfono... Una señora tenía un perro boxer que roncaba al dormir. Consultó el caso con un veterinario, y éste le aconsejó que atara un listón a los testículos del perro. No dejó de parecerle raro a la señora aquel remedio, pero siguió la recomendación: le ató en aquella parte al perro un listón rojo. Esa noche el marido de la señora llegó a su casa de madrugada y en completo estado de ebriedad. Se echó en la cama y comenzó a roncar. La señora se acordó de la sugerencia del veterinario y ató un listón azul a la parte correspondiente de su esposo. A media mañana despertó el temulento. Fue al baño y se vio el listón azul en la parte donde su esposa lo había puesto. En ese momento llegó el perro luciendo también su listón rojo. "-Amigo -dice el sujeto dirigiéndose al boxer-. No sé dónde andaríamos anoche, pero yo gané el primer lugar, y tú el segundo"... FIN.
