El automóvil del agente viajero se descompuso, y éste buscó refugio en casa de un granjero. "-Podrá pasar aquí la noche -le dice el campesino-. Pero tengo mujer y tres hijas en edad de merecer: si usted se toma alguna libertad con ellas, usaré mi escopeta”. Después de cenar el viajero se dirigió a su cuarto. Apenas se apagaron las luces de la casa sintió unos pasos tácitos. Entró la hija menor del dueño de la casa y se acostó a su lado. "-¡Por Dios! -se angustia el invitado-. ¡Tu papá me va a matar con su escopeta!”. "-No te apures -lo tranquiliza ella-. Está descargada”. La pizpireta chica se refociló cumplidamente con el joven galán y luego se alejó. Media hora después entra la segunda hija. "-¡Vete por favor! -le ruega en voz baja el individuo-. ¡Si tu padre se da cuenta de que estás aquí me matará con su escopeta!”. "-No temas -le dice ella-. Está descargada”. Goza la voluptuosa muchacha los placeres del amor y se retira luego. Pasa una hora y llega la hija mayor. "-¡Por favor, sal de aquí! -le pide el azorado agente-. ¡Tu papá me va a disparar con su escopeta!”. "-Tranquilízate -responde la muchacha metiéndose en la cama-. Está descargada”. ¡Ah, noche de amor! Después de ida la muchacha el visitante se dispuso a gozar de un descanso que mucho merecía y que necesitaba más. En eso, sin embargo, se abrió la puerta y entró con leve andar la esposa del labriego. "-Váyase, señora” -suplica el fatigado mozo-. "-¿Por qué? -pregunta la mujer-. ¿Tienes miedo de la escopeta de mi marido? Está descargada”. Replica con feble voz el viajero: “-La mía también”... ¡Inane escribidor! ¿Así incitas a tentaciones de la carne, tan cara que está? ¿Así das a los tórculos historias deleznables do se funden la fachendosa palabrería del histrión con la gárrula procacidad de los goliardos? ¡Vela y coroza verdes sean tus galas, insensato, y público anatema tu baldón! Encamina por otras sendas tus perdidos pasos y vuelve al camino de la virtud... Hay quienes dicen que López Obrador tiene razón en su enfrentamiento con la Suprema Corte de Justicia. Yo no le aconsejo que insista en esa pugna con el Poder Judicial, de la cual seguramente espera sacar algún provecho político en su carrera hacia la Presidencia. (NOTA: Tampoco aconsejo ver la película llamada "La Noche del Lepus”, con Stuart Whitman, Janet Leigh y Rory Calhoun (1972, dirección de William Claxton). La palabra "lepus” quiere decir "liebre” en latín, y esa película trata de una terrible plaga de feroces liebres que atacan a los hombres en un desolado rancho de Arizona). Volviendo a lo de López Obrador, creo que su error consiste en que está regresando a sus andanzas populistas. En vez de mostrar cualidades de gobernante prudente, respetuoso de la ley, se presenta como un demagogo capaz de hacer aparecer la sinrazón como razonable. A ningún político le favorecen los escándalos. Hoy por hoy el tabasqueño va a la cabeza en la lista de los posibles sucesores de Vicente Fox. Expuesto continuamente a la atención de los ciudadanos, cualquier imprudencia le puede costar cara. A los ojos de algunos, López Obrador aparece como un rebelde que esgrime el lábaro de la justicia frente a un grupo de magistrados añosos y apegados a la pura letra de la ley. Los ciudadanos que piensan bien las cosas, sin embargo, recelan de quienes se apartan del cumplimiento de la ley o la miran con desdén. En ese trance está López Obrador... Agotada, desfallecida, exhausta, le dice la recién casada a su insaciable maridito al terminar el primer día de la luna de miel: "-¡Te amo, Enrique!”. "-No me llamo Enrique” -se desconcierta él. "-Perdona -responde la muchacha-. Pensé en el rey Enrique porque ya vas en el octavo”... (No le entendí)... FIN.
