RAFAEL IBARRA CAMACHO
EL SIGLO DE TOREEÓN
FRANCISCO I. MADERO, COAH.- Al menos 20 personas resultaron defraudadas en el programa Techo Lagunero de Desarrollo Social, pues desde el mes de agosto pagaron la parte que les correspondía y no les han hecho entrega de su paquete.
La regidora panista Soledad Margarita Gracia Tostado hizo esta denuncia y agregó que “este programa se estuvo manejando con muchas irregularidades, creo que el Gobierno del estado no depositó el dinero que le correspondía y por eso no se han entregado los techos, les dijeron a las familias que se tienen que esperar hasta el próximo año”, dijo.
Gracia Tostado señaló que el problema surgió porque este programa tenía mucha demanda entre la población de este municipio, por esta razón el Alcalde se comunicó a Saltillo y pidió que se ampliará margen del mismo, aunque la respuesta fue positiva al final no se alcanzó a cubrir este incremento y estas familias no alcanzaron paquetes.
“El Alcalde nos informó que cuando pidió la ampliación del tope financiero le dijeron que sí se podía, pero todo el arreglo fue verbal, nunca hubo un escrito de por medio, y el se confió y empezó a decirle a la gente que se podía inscribir, los beneficiarios pagaron en el banco los 500 pesos pero el Gobierno del estado no pagó su parte y por eso el proveedor no entregó el material de estas personas”, dijo.
La regidora de oposición dijo que las familias afectadas se encuentran muy molestas porque ya se habían hecho la ilusión de recibir este beneficio y con mucho sacrificio reunieron los 500 pesos para depositarlos en el banco.
“No es posible que el Alcalde haga estos compromisos de palabra, por eso ahora que se incumplió este acuerdo de palabra los afectados fueron estas familias, por eso todo debe ser por escrito”, dijo.
Gracia Tostado señaló que el próximo año el departamento de Desarrollo Social debe poner más atención para evitar que las personas beneficiadas se queden sin recibir sus paquetes, pues recalcó que muchas veces las familias hacen un gran esfuerzo para reunir la cantidad de dinero que les corresponde y luego se desilusionan cuando no reciben su material.