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SAN JUAN CHAMULA, CHIAPAS.- Indígenas chamulas, afectados por las muertes de siete personas en la última semana, emplazaron a la PGJE para aclararlas totalmente en cinco días más, pues de lo contrario, advirtieron, tomarán la ley por su propia mano.
Marcelina Álvarez, indígena promotora social del municipio, aseguró que al término de estos cinco días, las autoridades de las comunidades afectadas y el pueblo del municipio de San Juan Chamula decidirán el castigo que aplicarán a sus agresores.
De tal manera, esperan que la Procuraduría General de Justicia del Estado esclarezca en ese plazo las muertes y aplique la justicia de manera inmediata.
Por su lado, la PGJE ha ubicado a los presuntos victimarios quienes también son oriundos de este municipio y que responden a los nombres de Pascual Heredia Hernández, Enrique Hernández Hernández, Zacario Hernández Hernández, Mariano Gómez Heredia y Ramón Patishtán López, ya detenido en el municipio de Berriozábal.
Asimismo, existen otros presuntos involucrados de identidad no revelada y sobre quienes se ejercerá acción penal de acuerdo a declaraciones del procurador, Mariano Herrán Salvatti el jueves pasado.
En tanto, Marcelina Álvarez afirmó que las muertes de los dos policías tradicionales, ocurridas la mañana del martes fue muy dolorosa, y por ello, dijo, la comunidad no está dispuesta a que sus decesos se mantengan impunes, como, señaló, ha sucedido en otros casos.
“Estamos muy cansados, en el olvido, hasta ahora no nos han hecho caso”, comentó otro indígena de nombre Salvador González Díaz, quien lamentó que el gobernador Pablo Salazar nunca se haya reunido con las autoridades chamulas y menos aún, visitado el municipio.
González Díaz lamentó que hasta tres días después de la muerte de los dos policías chamulas, fue instalado sólo un campamento sectorial con elementos de la Agencia Estatal de Investigación en el entronque de la carretera estatal San Cristóbal-Larráinzar con la brecha hacia Tres Cruces.
Ayer, las autoridades de estas comunidades cumplieron con la tradición de sentarse en la plaza pública para atender a todos los ciudadanos que se acercaran, aunque no tuvieron mucha actividad debido, opinaron los entrevistados, a la tristeza que existe en el pueblo por la muerte de los policías tradicionales.
Por eso hablaron de un emplazamiento de cinco días a las autoridades estatales para esclarecer formalmente los hechos violentos en los cuales perdieron la vida siete personas, cuatro católicos tradicionalistas, un indígena evangélico y dos policías estatales.