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Buenos Aires, ARGENTINA.- Las campañas para la elección presidencial del 27 de abril en Argentina siguieron ayer en su última etapa en medio de acusaciones de fraude y un marcado ambiente de incertidumbre sobre el resultado ante las reñidas encuestas.
El candidato del gobernante Partido Justicialista (PJ), Adolfo Rodríguez Saá, señaló que el actual gobierno busca “instalar” dudas de fraude para “enrarecer el clima electoral”, mientras su rival Carlos Menem aseguró que “vamos a arrasar en las urnas”.
Rodríguez Saá sostuvo en conversación con reporteros que los fiscales informáticos estarán “muy atentos” para evitar cualquier movimiento irregular tras las votaciones.
El abanderado del Movimiento Nacional y Popular afirmó que ninguno de los candidatos logrará la mayoría para alzarse con el triunfo en la primera vuelta de abril y confió que disputará el cargo con Menem en la segunda ronda, programada para el 18 de mayo.
El ex mandatario, quien gobernó una semana durante la crisis de 2001, dio como un hecho la necesidad de llegar a una segunda vuelta, pues “el voto aparece hoy muy fraccionado y tendría que darse un fenómeno inesperado” para que alguien gane el 27 de abril.
El candidato del PJ, Carlos Menem, sostuvo por su parte en la central provincia de Córdoba que ganará la presidencia en la primera ronda y dijo que su Movimiento Nacional por la Lealtad “arrasará en las urnas”.
Menem, quien gobernó de 1989 a 1999, indicó en declaraciones a una radiodifusora cordobesa que “vamos a ver qué pasa el (día) 27 y estoy seguro de que no habrá segunda vuelta. Son todos buenos candidatos, pero no les va a alcanzar” para superarlo en las urnas.
Recordó que antes de las elecciones de 1989, cuando llegó por primera vez al Ejecutivo, y en 1995, cuando logró la reelección, “yo para las encuestas perdía y en la realidad siempre gané”
La justicia autorizó a los ex presidentes Menem y Rodríguez Saá, así como a Kirchner, participar de manera simultánea en los comicios presidenciales del 27 de abril bajo la bandera del justicialismo.
Menem reconoció además que durante la década que estuvo en el gobierno “me pude haber excedido en el gasto público”, aunque argumentó que “era fundamental excederse para un país que crecía, para un país que necesitaba nuevas estructuras”.
“Estoy totalmente convencido de que voy a ganar en la primera vuelta”, afirmó el ex jefe de Estado al señalar el apoyo popular que recibe en su recorrido proselitista y las encuestas “serias” de organismos oficiales que “me dan ganador por varios puntos”.