“La depresión es la principal causa de suicidios en Durango, la cual es provocada por diferentes factores, pero entre ellos el más común es el estrés”, declaró Martha Palencia Núñez, directora del Hospital Psiquiátrico.
Un mundo materialista en donde la falta de dinero, de tiempo para convivir con la familia y de una creciente pobreza espiritual han dado pie a que el estrés alcance niveles que hace años no eran ni imaginables, además de las cargas de exigencia que se ha impuesto el hombre actual como el estar a la moda, tener buena figura, alcanzar mejores niveles laborales, etc., contribuyen a su crecimiento.
El año pasado se tuvo conocimiento de 89 casos de personas que se quitaron la vida en el estado, de los cuales sólo 28 sobrepasaban los 35 años de edad y en su mayoría su decisión fue tomada bajo dicho enfermedad.
Hasta el momento en estos cinco meses se tienen registrados sólo 22 suicidas, 14 menos que en el 2002, pero esto no quiere decir que el problema esté disminuyendo, ya que existe una cifra negra que no se maneja y que marca que por cada caso conocido otros siete que no son expuestos a la luz pública.
Según los datos proporcionados por la directora del Hospital Psiquiátrico, el 85 por ciento de las muertes de este tipo son provocadas por la enfermedad conocida como depresión y el otro 15 es debido a trastornos mentales causados por daños físicos en el cerebro.
Dicho mal afecta la percepción de las personas, su forma de sentir y actuar volviendo a todos los pensamientos negativos, como si se formara un filtro en el que se eliminan las cosas positivas por donde sólo cuenta lo malo, llevando a las personas a pensar que no tienen nada bueno, que no logran nada de valor en sus vidas.
A la primera etapa de padecimiento mental se le conoce como distimia, la cual está en un grado muy bajo de gravedad, pero de ahí se pasa al punto leve con el cual los ánimos empiezan a disminuir, para posteriormente continuar con el de moderado, que presenta disfunción en el sueño; los afectados no encuentran su lugar, siendo el origen de vicios como el alcohol, y finalmente el nivel severo con un daño total; se piensa totalmente negativo así como fuera de la realidad, de aquí el suicidio es algo que no está lejano.
Quienes están en mayor riesgo de caer en este trastorno son los adolescentes, ya que ellos sufren mucho, porque son afectados fácilmente por los conflictos familiares, además la ropa, las actitudes, la figura y las posesiones son más exigidas entre sí, causando frustraciones o tensiones que inciden en su salud.
“Los factores detonantes cada vez son más severos, pero no son las causas de un suicidio, ya que es un conjunto de problemas que se tienen por los afectados”, explicó Palencia Núñez.
Existen dos clases de suicidios que son catalogados como el planeado y el impulsivo, el cual por lo general es secundario al trastorno mental orgánico que es provocado por un daño físico, el cual mueve a la gente a actuar sin pensar, poco tolerante, impredecible, auto destructivas.
Uno de los orígenes de este tipo de lesiones son desde el nacimiento ya que en muchos casos los partos son mal atendidos y aquí es muy probable que se presente dicha lesión.
Como se puede observar, son muchos los factores y bastante la información necesaria para combatir un mal de tales magnitudes, el cual puede estar más cerca de lo que se puede pensar en algún familiar o conocido, incluso en nosotros mismos.
Por su parte el Hospital Psiquiátrico mantiene pláticas en varios puntos de la ciudad y el estado, pero los recursos limitados no les permiten llegar con la frecuencia y profundidad que se desea, lo cual podría lrograrse si las instituciones que tienen a su cargo la labor de salud mental de la población buscaran la manera de trabajar en conjunto y dejar oficialismos en pro de la población.