El titular de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas del Estado, Héctor Vela Valenzuela, afirmó que gracias a los trabajos para desazolvar oportunamente los canales que cruzan por la ciudad de Durango, como San Ignacio, Ciprés, Acequia Grande y Arroyo Seco, disminuirán los riesgos de las inundaciones que se han presentado en años pasados.
Según Héctor Vela, la ciudad de Durango ha presentado históricamente diversas zonas de inundación en época de lluvias, originadas principalmente por la carencia de un sistema integral de drenaje pluvial con la capacidad adecuada que desalojen los escurrimientos eficientemente, lo que genera acumulaciones que ocasiona daños a la economía y salud de las personas.
De acuerdo con el estudio y proyecto ejecutivo del Plan Maestro de la Red Pluvial y Canalización de Arroyos para la Protección Contra Inundaciones, se vio la necesidad de realizar obras de rectificación de ríos y desarrollo de infraestructura pluvial, como los colectores y estructuras asociadas.
Por la ciudad de Durango cruzan los arroyos Temazcal, Las Mangas, San Juan, La Atarjea y Arroyo Seco. El objetivo de las obras hidráulicas es canalizar los escurrimientos pluviales con eficiencia y evitar las inundaciones. Entre ellos está la Acequia Grande, cuyo afluente proviene de las presas El Hielo y Las Mangas, y desembocan en el río Tunal.
El canal San Ignacio, cuyas aguas provienen de la presa La Tinaja, que atraviesan al norte de la ciudad y desembocan también en El Tunal.
Según Vela, cuatro de los cinco arroyos que cruzan la ciudad han sido canalizados de manera eficiente para evitar los altos riesgos de inundaciones.
El Arroyo San Juan, que nace en el norte del valle y escurre en dirección sureste, y cuyas aguas son agresivas en periodo de lluvias, se canalizan por los colectores Ciprés y San Ignacio, y ambos fueron desazolvados con oportunidad.
El arroyo La Atarjea, ubicado en la parte oriente de la ciudad, y que escurre hacia la zona urbana hasta el parque Sahuatoba, se incorpora a la Acequia Grande, que también fue objeto de limpieza para quitar azolves que pudieran obstaculizar el tránsito de las aguas.
En materia de canalización de escurrimientos pluviales sólo está pendiente el Arroyo Seco, un afluente que tiene su origen en la presa Lázaro Cárdenas (Garabitos), y que atraviesa la zona urbana por el sureste de la ciudad.
El funcionario informó que también el Arroyo Seco, aun y cuando se realizarán los trabajos de rectificación, fue objeto de obras de desazolve y limpieza, con lo cual se reducen los riesgos de inundaciones.