Pekín, (EFE).- Un grupo de arqueólogos chinos ha hallado en la provincia de Sichuan (suroeste) los primeros vestigios de fabricación de pólvora que datan de hace mil años, informó la agencia oficial Xinhua.
"Estamos muy entusiasmados por el hallazgo de importantes materiales que prueban la invención de la pólvora" declaró Luo Zhewen, responsable del grupo de expertos de la administración.
Hasta este hallazgo, las únicas pruebas de la fabricación de pólvora eran escritas, por lo que su origen aún era considerado un misterio por los científicos.
En varios talleres ubicados en cuevas en la montaña de Laojun se hallaron hace unas semanas evidencias de la fabricación de salitre, uno de los ingredientes más importantes de la pólvora, cuya invención se sitúa durante la Dinastía Tang (618-907).
"En dos de las cuevas descubrimos restos de los talleres y del almacén, mientras que en otra hallamos cuatro talleres de cientos de metros cuadrados con yacimientos de salitre y fragmentos de porcelana", declaró Xu Xiangdong, líder de la expedición de arqueólogos.
Según estos vestigios, los científicos estiman que por cada 100 kilos de tierra se extraía un kilogramo de salitre y la cocina tenía capacidad para acoger a un centenar de trabajadores.
El descubrimiento prueba que la montaña de Laojun fue la mayor base de la zona en la producción de salitre, denominado por los extranjeros "nieve china", y que desde allí era transportado a Europa y Asia occidental a través de una ruta entre las provincias de Sichuan y Gangsu (sur).
Los expertos señalan que el gran número de lonjas en las ciudades de los alrededores que datan de la misma época eran utilizados para comerciar con el salitre.
La pólvora es una de las cuatro grandes invenciones de la civilización china, junto con el papel, la brújula y la imprenta, y según las fuentes escritas chinas se obtenía de la combinación del salitre, el sulfuro y el carbón.