Agencias
Guadalajara, Jalisco.- Dispuestos a dar la batalla legal, los inversionistas privados de Mexicana de Lubricantes (Mexlub) negaron que exista interés en venderle a Pemex las acciones de las cuales son dueños en forma mayoritaria.
Directivos de Impulsora Jalisciense ratificaron la posición de los socios encabezados por Salvador Martínez Garza, expuesta a través de un escueto comunicado de prensa, donde negaron la posible compra de la totalidad de las acciones por parte de Pemex Refinación, dado que “no existe interés en venderlas”.
En el boletín de prensa fechado el 17 de mayo, pero que se hizo circular apenas ayer en distintos medios de comunicación, Impulsora Jalisciense, que posee 51 por ciento de las acciones con derecho a voto del capital social de Mexicana de Lubricantes, señaló que la noticia difundida por Pemex Refinación, de dar por hecho la compra de todas las acciones, no tiene sustento.
En lo que puede interpretarse como la ruptura de las negociaciones entre los socios privados y las autoridades, en su comunicado Impulsora Jalisciense denunció que la noticia “forma parte del ataque sistemático de Pemex Refinación hacia Mexicana de Lubricantes” -socia de 49 por ciento de las acciones con derecho a voto-, “causando con ello graves daños y perjuicios a la coinversión celebrada en 1993 y consecuentemente a todos los mexicanos”.
Ya en febrero del 2002 Pemex había anunciado la rescisión de los contratos de coinversión, acción mediante la cual daba por concluida la sociedad con Salvador Martínez Garza y el resto de los integrantes de Impulsora Jalisciense.
Sin embargo, unos días después la empresa logró frenar la intención de la paraestatal mediante una orden de suspensión emitida por un juez federal.
La semana anterior, el director de Mexicana de Lubricantes, Octavio Sánchez Mejorada, había descartado que la pérdida de la marca Mexlub -tras la derrota en el juicio contra Bardahl- diera tener efectos negativos en las negociaciones en las que las partes intentaban pactar la apertura de la venta de lubricantes en las gasolineras del país.
No obstante, Pemex justificó que la compra del cien por ciento de las acciones de Mexicana de Lubricantes -para generar la competencia en el mercado- se determinó en virtud de haberse detectado daños en los activos intangibles de la empresa.