Por Eunice Martínez Arias
El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- La música de mariachi dejó de sonar en la casa de la familia Escobedo Hernández. El 11 de septiembre el patriarca del hogar y fundador del Marichi Los Gavilanes se despidió de este mundo. Adiós a las noches en vela, a las tocadas donde acompañó a artistas como Vicente Fernández. Hasta nunca a las serenatas y a sus queridos compañeros.
Don Felipe Escobedo Crispín murió en ?la raya?. Hace ocho años, cuando apenas se dirigía a trabajar, fue embestido por un automóvil a la altura de la Preparatoria Venustiano Carranza. A partir de entonces su salud comenzó a deteriorarse, pero ni aún así abandonó del todo el grupo que formó con tanto ahínco en 1960: el mariachi Los Gavilanes.
Cargado con varias fotografías antiguas, llegó a la redacción de El Siglo Felipe Escobedo Hernández, hijo mayor de don Felipe. Su única intención era homenajear a ese hombre trabajador, reservado y que no lo dejó dedicarse a la música.
?En aquél entonces (décadas de los años 60 y 70) el mariachi donde andaba mi papá era el mejor de todos; cuando venían los artistas los buscaban para que los acompañaran en sus presentaciones, algunos fueron Lola Beltrán, José Alfredo Jiménez, Lucha Villa, Vicente Fernández, Ignacio López Tarso, El Chicote y La Prieta Linda?, platicó.
El señor Felipe era inconfundible, sin importar que fuera de día o de noche siempre portaba lentes oscuros. Los usó desde niño, cuando de un golpe perdió un ojo, ?pero eso no fue impedimento para que destacara. Su fuerte era el violín pero tocaba todos los instrumentos?, aclaró de inmediato su hijo.
Con algo de melancolía el joven descendiente asegura que antes, el oficio de mariachi sí era respetado a diferencia de ahora. ?A él lo contrataba mucha gente importante. Mi papá los ensayaba mucho (a Los Gavilanes) por eso eran los mejores. Actualmente la calidad del grupo ha ido decayendo, por eso ya hay mejores que ellos?.
Antes de haber sido un hombre muy serio y que hablaba poco con sus hijos, don Felipe trabajaba arduamente para que nunca les faltara lo necesario.
?El ejemplo que me dio mi padre fue el del trabajo y de salir adelante. Constantemente me decía: no te venzas, siempre habrá una salida?.
Dedicado a la música
Diariamente, don Felipe salía de su hogar a las cinco o seis de la tarde y regresaba a las cuatro de la mañana.
-Cada año, el día de Santa Cecilia su papá encabezaba la peregrinación de los mariachis.
-De no haber sido atropellado, hubiera seguido trabajando como antes ?le llegaron a salir trabajos en Monterrey y Mazatlán?.
-Le gustaba poner discos, agarrar el cuaderno y escribir notas musicales. Sus intérpretes favoritos eran El Trío Los Panchos, Glen Miller y Vicente Fernández.
-Tal como ahora lo hace el Mariachi Continental, el mariachi Los Gavilanes ?se aventaba rock and roll?.
-Su competencia fuerte era El Mariachi Los Madrugadores y El Mariachi San Antonio.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón
FOTOFRASE
Insustituible
?Conviví con Felipe como 30 años; era sencillo, ayudaba a todos los compañeros del gremio (sindicato), era responsable con su familia y el más cumplido?.
MARGARITO ZÚÑIGA,
INTEGRANTE DEL MARIACHI LOS GAVILANES
PIES DE FOTOGALERÍA
Para recordar
Su música ya no está pero los recuerdos continuarán por siempre.
-Posando para la foto.
-Con Ignacio López Tarso en una visita a La Laguna.
-Acompañado de El Chicote.
-A Vicente Fernández le gustaba que lo acompañara en sus presentaciones.
-Felipe Escobedo en los inicios del Mariachi Los Gavilanes.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón