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MILÁN, ITALIA.- Decenas de miles de residentes de esta ciudad y turistas fueron evacuados de sus casas y hoteles ayer y cientos de trenes debieron desviar sus rutas para que expertos en explosivos pudieran detonar una bomba de la Segunda Guerra Mundial encontrada por trabajadores de la construcción.
Se trató de la mayor evacuación de Milán en seis décadas, desde la guerra.
Unos 55 mil residentes de dos mil edificios de departamentos y huéspedes de hoteles de la vecina Viale Brianza comenzaron a evacuar a las 8:30 de la mañana (hora local).
Los pobladores pudieron regresar pocas horas después, cuando la bomba de 500 kilogramos fue desactivada y trasladada a las afueras de Milán para ser detonada.
La estación central de trenes operó nuevamente y los negocios abrieron sus puertas.
Numerosos milaneses resolvieron pasar el día con amigos y parientes que vivían fuera del área de evacuación. Otros se apuraron por salir de la ciudad en tren antes de que unas 200 locomotoras fueran desviadas hacia otras estaciones.
Algunos se refugiaron el colegios de la ciudad durante las horas de evacuación.
La bomba, arrojada por un avión aliado durante la guerra, fue descubierta mientras se realizaban trabajos de excavación para la construcción de un nuevo edificio.
También ayer, unas 400 personas fueron evacuadas en la ciudad de Mantua, a unos 160 kilómetros de Milán, para que los expertos en explosiones pudieran detonar una bomba aérea de la Segunda Guerra Mundial encontrada en un área donde las fuerzas de la ocupación alemana almacenaban municiones.
Los servicios de electricidad y gas, interrumpidos como precaución durante la detonación, fueron restaurados y los residentes regresaron a sus viviendas.