El Sindicato de Trabajadores Académicos de la Universidad Juárez del Estado de Durango augura que el 2003 será complicado para la educación pública en general, pero podrá tener aspectos positivos si las autoridades de Rectoría de la UJED y los diferentes sectores que conforman la comunidad universitaria se unen en torno al beneficio de la institución.
Anabella Humarán Sánchez, secretaria general del organismo sindical, consideró que en el año que apenas inicia la UJED incursionará en un proceso interesante para universitarios y no universitarios, el cual es el de la Reforma que atañe a la Máxima Casa.
Sin embargo, la líder sindical dejó claro que el panorama académico pintaría bien si los promotores de la referida reforma reconocen que el documento que se tiene como anteproyecto es apenas el inicio, no la conclusión.
“Es que es un asunto que nos interesa mucho no sólo a los miembros del STAUJED, sino a muchas corrientes críticas de la Universidad Juárez, las cuales queremos que el documento que se tiene motive las conciencias de todos los universitarios para poder empezar, ahora sí, a hacer añadiduras, quitar algunos aspectos, nutrir o modificar otros, etcétera”, dijo.
Anabella mencionó que el 2002 no fue el mejor año de la UJED, ya que el aspecto de la deficitaria situación económica no se solucionó sino, por el contrario, se hizo más grande, y hasta el momento no hay indicios de que se tenga la solución en la mano.
Por ello, Humarán se pronunció a favor de que la Reforma Universitaria sea integral, y no únicamente que haga un “esbosamiento” de lo académico y se base más en el carácter administrativo, que también es importante pero no lo único, acotó.
Dijo no simpatizar mucho con estos últimos años del segundo periodo de José Ramón Hernández Meraz como Rector; sin embargo, ofreció al STAUJED como una alternativa más para que la Universidad Juárez de Durango mejore y como un buscador más de soluciones, no de conflictos.
Reiteró que es difícil hacer una evaluación educativa del año anterior sin contemplar la crisis de presupuesto y el aumento del déficit de la Máxima Casa de estudios de Durango.
Agregó que las posibles soluciones a ese problema en particular, así como la necesidad de que se dedique tiempo y espacio suficiente a la discusión de la academia, que es a final de cuentas el principal fin de la UJED, se deben acentuar en el análisis que se hará en el 2003 de la Reforma Universitaria.