Reuters
México, DF.- Merrill Lynch dijo ayer que redujo a 1.9 por ciento, de 2.3 por ciento, la perspectiva de crecimiento de la economía mexicana para el 2003, debido a una actividad más débil de la esperada en el primer semestre del año como reflejo de la economía estadounidense.
México, la segunda mayor economía de América Latina, tiene una elevada dependencia económica de Estados Unidos, su principal socio comercial en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y destino de casi 90 por ciento de sus exportaciones.
El gobierno mexicano espera un crecimiento económico de 3.0 por ciento para todo el año, un pronóstico demasiado optimista según analistas privados, y que mantiene pese a que en el primer trimestre el Producto Interno Bruto (PIB) creció sólo 2.3 por ciento.
Merrill Lynch ya había recortado en marzo la expectativa de 2.7 por ciento que había calculado para el crecimiento del PIB mexicano.
Entre las razones para una menor actividad en el primer semestre, la firma citó en un reporte ?un crecimiento del PIB menor al esperado en el primer trimestre, una perspectiva más moderada del consumo privado y una menor expectativa de crecimiento de la producción industrial de Estados Unidos?.
México comenzó a salir en el último trimestre del 2002 de un período recesivo por la desaceleración de Estados Unidos agudizada desde los atentados del 11 de septiembre del 2001.
En el 2002, la economía mexicana creció 0.9 por ciento.
Merrill Lynch pronosticó para México una mejor recuperación en el segundo semestre del año, en línea con lo que se espera para Estados Unidos, y añadió que mantiene su pronóstico de crecimiento para la economía mexicana de 4.0 por ciento para el 2004.
Mantiene expectativa
del peso e inflación
La firma también mantuvo sus previsiones para el peso, la moneda mexicana, a 11.15 por dólar al cierre del segundo trimestre por el posible ?ruido político? previo a las elecciones legislativas de julio y a las bajas tasas de interés locales.
El peso tuvo una sensible depreciación en los primeros dos meses del año por los temores sobre la guerra liderada por EU contra Iraq, pero luego recuperó terreno tras el anuncio del banco central mexicano de un mecanismo para subastar dólares en el mercado cambiario.
La moneda cerró ayer al menudeo en 10.46 por dólar.
Merrill Lynch estimó que la inflación en México sería de 3.8 por ciento al cierre del 2003, en línea con la meta del banco central mexicano de 3.0 por ciento, con un margen de +/- 1.0 por ciento.