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AGUASCALIENTES, AGS.- En los dos encuentros de la serie por el título que se han celebrado en el Gimnasio Olímpico, de esta ciudad, los seguidores de Panteras de Aguascalientes han mostrado apoyo incondicional a su escuadra.
Pero, como a veces sucede cuando hay gran afluencia de aficionados a cualquier espectáculo deportivo, siempre habrá "el negrito en el arroz", lo cual provoca pensar que asistir a dicho escenario es peligroso.
En el cuarto juego de la serie final de la Liga Nacional de Baloncesto profesional (LNBP), entre Panteras y la Ola Roja del Distrito Federal, se suscitaron algunos incidentes que pudieron haberse evitado.
Al término del cuarto juego entre felinos y olirrojos, varias decenas de aficionados se metieron a la duela para felicitar a sus jugadores por el apretado triunfo que lograron por 81-80 ante los capitalinos, pero hubo otros que aprovecharon para provocar a los visitantes.
Uno de los jugadores que no supo controlarse fue el senegalés Boubacar Aw, quien después de soportar durante varios minutos los insultos de un aficionado, se desesperó y lo empujó, lo que casi desencadena una batalla campal, que se pudo evitar.
Pero en el caos, otros espectadores aprovecharon el anonimato para arrojar botellas de plástico, y una de ellas golpeó a un fotógrafo, quien sufrió una pequeña herida en la parte interna del labio superior.
Algunos comentaristas locales, como José Luis Guerra, aseguraron que los jugadores de la Ola Roja del Distrito federal habían sido los incitadores y los provocadores en este esbozo de reyerta .
Seguramente en el quinto duelo de esta serie, en este mismo escenario, algunos aficionados se dejarán influenciar por estos comentaristas y tendrán un comportamiento agresivo con la escuadra capitalina.
La afición local en varias ocasiones ha mostrado madurez al señalar a individuos que arrojan objetos a la cancha, y debe seguir así, pues tiene cultura deportiva y conocimiento del deporte, lo que es evidente en la manera de impulsar a sus equipos.