Los habitantes de Nuevo Graseros no han recibido pago por sus tierras utilizadas en la construcción de la Presa Francisco Zarco hace 39 años
Cd. Lerdo, Dgo.- Los ejidatarios de Nuevo Graseros no tienen solución y respuesta alguna en el pago de sus tierras utilizadas en la construcción de la Presa Francisco Zarco hace 39 años. Contrario a lo manifestado por el gobernador del estado, Ángel Sergio Guerrero Mier, en su reciente visita donde dijo que estaba por liquidarse, los afectados aseguran que no se tiene algo definitivo.
El director de Desarrollo Rural, Conrado Antúnez Ponce, dijo que están sin encontrar una satisfacción los 132 ejidatarios afectados desde 1964 en el que los productores tuvieron que dejar sus tierras de cultivo para ubicarse en el punto donde actualmente se encuentra el poblado.
“Se trata de una afectación de 1,614 hectáreas, las cuales quedaron clasificadas en 380 de riego, 596 de temporal y 638 de eriazo”.
“Han recibido un anticipo del Gobierno del Estado de 804 mil pesos, en un fideicomiso están los cuatro millones 904 mil pesos que Comisión Nacional del Agua hizo llegar a esa institución como pago de la superficie afectada” recordó el funcionario público.
Sin embargo, -agregó- los ejidatarios solicitaron cinco millones 400 mil pesos en especie, hubo una propuesta de la asamblea general y el Gobierno del Estado estuvo de acuerdo, pero ha faltado que CNA cierre este problema añejo considerado el más fuerte en la cuestión agraria del municipio.
La cantidad de cuatro millones 904 mil pesos no fue aceptada por los ejidatarios y se inconformaron porque de acuerdo a los avalúos y clasificación de las tierras, es una cantidad irrisoria que no cubre dignamente el valor de los predios.
Antúnez Ponce: “es un patrimonio heredado y en estos momentos ellos quisieran tener el recurso económico para disfrutarlo y reactivar su economía, para trabajar con proyectos productivos, son muchos años y deben abandonar por necesidad el vaso de la presa. Todavía hay la esperanza de recibir una cantidad justa en efectivo y especie, pero falta responsabilidad e interés de CNA”, dijo Antúnez Ponce.
Existe temor que el conflicto de Graseros tome otras dimensiones –añadió- ya que se han tenido reuniones y se tenía el acuerdo de finiquitarlo el 4 de septiembre del 2002 y no fue así.
Por último dijo, que fue solicitado de nueva cuenta a la CNA que a la mayor brevedad regresen a la mesa y lleguen a un acuerdo definitivo. Hay una propuesta del Gobierno del Estado que debe complementarse con ellos, ya que de no hacerlo, seguirán como hasta ahora.