México, (Notimex).- Este 2003 podría marcar el despegue de las compras por Internet en México, aunque los usuarios de la web aún mantienen ciertas reticencias a proporcionar sus datos bancarios a través de la red.
En noviembre del año pasado, el Congreso de la Unión aprobó una reforma que regula actividades económicas en Internet y fomenta el comercio electrónico ante el avance de tecnología en el país y la multiplicación sin control de este tipo de transacciones financieras.
En la actualidad, supermercados y tiendas departamentales ofrecen el servicio de compras en línea. Gigante, Comercial Mexicana, El Sardinero, Sumesa y Costco cuentan con una página de Internet donde además, algunas de ellas presentan recetas, ofertas, directorios y otros servicios agregados.
Tiendas departamentales como El Palacio de Hierro, Liverpool o Suburbia también dan servicio en línea, así como establecimientos especializados de mayoreo, librerías, jugueterías y otros proporcionan el servicio de compras por Internet. Ello sin olvidar que también se pueden adquirir boletos para el cine, teatro o conciertos.
La característica determinante del comercio electrónico es el hecho de que un cliente puede usar la conexión para realizar una transacción comercial con un proveedor y reemplaza muchAs de las funciones diarias que pueden consumir una gran cantidad de tiempo para ambas partes.
De acuerdo con Cisco Systems, el comercio electrónico ofrece una nueva forma de hacer negocios que eventualmente cambiará el modo en que vivimos, ya que las compañías venden a través del web una gama multidiversa de artículos, desde libros hasta grúas.
Sin embargo, agrega, el crecimiento de esta forma de hacer negocios se ha limitado ante la desconfianza de los consumidores en las computadoras y los temores de fraude de la tarjeta de crédito a través del web.
Al respecto, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) advierte que realizar compras por Internet conlleva ciertos riesgos que los usuarios deben tener en cuenta para no resultar sorprendidos.
Por ello, recomienda a los usuarios revisar que el sitio incluya el domicilio, la denominación legal y el nombre o marca de comercialización de la empresa y sus productos, que presente número telefónico o número de fax al cual se pueda comunicar en caso de requerirse alguna aclaración.
Además, los productos o servicios comercializados deben estar claramente identificados y señalar de manera precisa y suficiente las características de los mismos, de manera que permita la toma de decisiones. Los costos de la transacción deben ser precisos, así como los impuesto aplicables, los términos de entrega, condiciones y formas de pago, costos de envío y restricciones para la adquisición de los bienes o servicios ofrecidos, como geográficas, de tiempo, por tipo de producto o de cantidad a adquirir.
Según la consultora IDC (Internet Data Corporation), el número de compradores virtuales en el mundo alcanzará los 183 millones en el año 2003. Otros analistas prevén que en menos de cinco años, el sector dedicado a la venta de bebidas y alimentos en línea vivirá su mejor momento.
Y es que con sólo una computadora, un proveedor de Internet y una línea telefónica, cualquier persona puede comprar desde un producto para la despensa, un artículo de su artista favorito, hasta un automóvil, sin necesidad de salir de casa.