18 septiembre 2003
México, (EFE).- El América fue el más beneficiado del complejo mecanismo de participación del fútbol mexicano en la Copa Libertadores, que retrasa un año la oportunidad para los campeones de los torneos de la liga local.
La oportunidad del América quedó abierta cuando la Federación Mexicana acordó honrar primero que nada la Copa de Campeones de la Concacaf, el requisito que le impuso la confederación para autorizar la incorporación a la Libertadores.
La Concacaf decretó que los clubes mexicanos con título de los torneos, Toluca y Monterrey, jueguen la Copa de Campeones y que aplacen un año su oportunidad para buscar un lugar en la competición de la Conmebol, cuando México tendrá tres plazas.
Con los campeones fuera, al menos para el 2004, la Concacaf y la Federación Mexicana establecieron que el primer boleto a la Libertadores, lo disputen los líderes de los torneos Apertura 2002 y el Clausura 2003,
El América, cuyo presidente negoció el acuerdo con la Concacaf, fue el líder del torneo Apertura 2002, y por eso peleará el lugar a la Libertadores, hasta ahora lo único seguro del mecanismo tan complejo que autorizaron.
El líder del torneo Clausura 2003 fue el Morelia, pero como todavía disputa la final de la Copa de Campeones de la Concacaf, habrá que esperar si tendrá obligaciones el año próximo en el torneo regional.
De no ser el Morelia, el Atlante, segundo club con más puntos, tendrá el derecho de pelearle al América un boleto directo a la Libertadores, en uno o dos partidos, según el acuerdo al que lleguen las directivas.
El que pierde entrará a una eliminatoria en la que estarán los siete equipos con más puntos en los dos torneos señalados y si alguno declina, el lugar será recorrido.
Entre otros equipos que tienen posibilidad de entrar a este sistema están el Santos, Guadalajara, Morelia, Toluca, Pumas UNAM, Tigres y Monterrey.