Juan Rulfo murió un siete de enero de 1986
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MÉXICO, D.F.- Admirado y reconocido por escritores universales, de una personalidad tímida, ensimismada; reacio a entrevistas y las que dio fue parco en su hablar, el autor mexicano Juan Rulfo murió el siete de enero de 1986 en la Ciudad de México.
Rulfo, quien sin duda es el escritor mexicano más apreciado en el orbe y cuya obra ha sido traducida a casi todos los idiomas del mundo, nació el 16 de mayo de 1918 en Apulco, una localidad cercana a San Gabriel, Jalisco, aunque fue registrado en la ciudad de Sayula, por lo que muchas biografías sobre él fechan su nacimiento en ésta.
Bautizado con el nombre completo de Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno, el autor de El Llano en Llamas y Pedro Páramo es hijo de Juan Nepomuceno Pérez Rulfo y María Vizcaíno Arias, quienes se habían casado el 31 de enero de 1914.
Su familia, compuesta también por sus hermanos mayor Severiano y los menores Francisco y Eva, se establece en 1919 en San Gabriel, donde cuatro años después será asesinado su padre.
A la edad de diez años, es enviado por su madre junto con su hermano mayor Severiano, a un internado de la capital del Estado de Jalisco para continuar sus estudios.
Para 1936, hace el intento de estudiar Derecho y de ingresar a la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), sin conseguirlo, aunque acude como oyente a clases.
Es cuando entra a trabajar a la Secretaría de Gobernación, donde conoce al escritor Efrén Hernández. A partir de este momento se sabe de la actividad literaria de Rulfo, que es seguida muy de cerca por Hernández.
Luego de realizar algunos viajes por el país, Juan Rulfo regresa en 1941 a Guadalajara, donde se establece y colabora, junto con Efrén Hernández, en la revista América, de la Ciudad de México.
En 1944 escribe el cuento “La Vida No Es Muy Seria en sus cosas", obra que se puede decir que marca el inicio de su producción.
En 1945 publica los cuentos Nos Han Dado la Tierra y Macario, que en fecha posterior habrían de formar parte del libro El Llano en Llamas.
En 1949 se publican sus primeras imágenes y a partir de ahí su trabajo fotográfico es más amplio que su obra literaria. Muestra de ello es la guía Caminos de México, que fue ilustrada con placas suyas.
Pero el autor tapatío continuó con su pasión, la literatura, y en los años siguientes continuó la publicación de sus trabajos: el cuento Talpa, El Llano en Llamas (1950) y Diles que no me Maten (1951).
Su primera obra publicada en forma de libro fue en el Fondo de Cultura Económica (FCE), casa editorial bajo la cual en 1953 habrá de aparecer "El Llano en llamas", con 15 cuentos.
A mediados de 1954, Rulfo entrega al Centro Mexicano de Escritores, del que fue becario en los períodos 1952-53 y 1953-54, una copia mecanográfica, con unas pocas correcciones a mano, de la novela que en este momento llevaba el título de "Los murmullos", y que en entrega posterior al FCE cambiaría por el de "Pedro Páramo".
Como parte de su trabajo, en 1964 se estrena la película El Gallo de Oro, dirigida por Roberto Gavaldón, sobre una historia escrita por Rulfo, y se filma La Fórmula Secreta, dirigida por Rubén Gámez con un texto del mismo autor.
Rulfo falleció el siete de enero de 1986, no sin antes ser publicado su libro de fotografías Inframundo (1981) y recibir en 1983 el Premio Príncipe de Asturias.
Anécdotas de Juan Rulfo
De acuerdo con una carta que envía a su novia, Clara Aparicio, un editor rechaza en 1947 su cuento Es que Somos muy Pobres con el argumento de que es “subido de color”. A su futura esposa también le confiesa que intentaba escribir “algo” que se llamaría “Una Estrella Junto a la Luna", que se convertiría en la novela Pedro Páramo.
En sus cartas a Clara, Rulfo habla de su actividad como fotógrafo, compras de libros, asistencia a conciertos sinfónicos, al ballet y al cine.
Pese al rechazo del editor, en ese año el cuento es publicado en la revista América.
Por esas misma fechas, Rulfo realiza actividades como fotógrafo aficionado, viaja muy seguido a los volcanes cercanos a la Ciudad de México e intenta trabajar en la industria del cine. Al mismo tiempo, compra libros, asiste a conciertos sinfónicos, al ballet y al cine.
Un mes antes de cumplir los 31 años, Rulfo se casa con Clara Aparicio, y es en ese mismo 1948 cuando se publica su cuento La Cuesta de las Comadres, del cual semanas antes habían sido leídos algunos fragmentos por radio.