El anestesiólogo Javier De la Torre Buendía está acusado de ser responsable del daño cerebral que sufrió Raúl Medina García
TORREÓN, COAH.- Es el Ministerio Público quien debe solicitar la inhabilitación del ejercicio de su profesión del doctor Javier de la Torre Buendía, cuando en la audiencia final presente sus conclusiones y de esta manera será tomado en cuenta por el Juzgado Primero Local Letrado en Materia Penal, en el caso de negligencia médica en agravio de Raúl Medina García.
Octaviano Sánchez Sánchez, titular del mencionado tribunal, aseveró que compete a dicha representación social la petición sobre la inhabilitación del profesionista que en caso de resultar culpable, la suspensión para ejercer podría alcanzar hasta diez años.
En cuanto a la actual situación de De la Torre Buendía, el juzgador dijo que se encuentra bajo fianza y goza de un amparo que impide se cumpla con el auto de formal prisión que se le giró por su presunta responsabilidad en el daño ocasionado a Medina García, durante la cirugía en la que el médico participó como anestesiólogo.
Sánchez y Sánchez dijo que el caso se encuentra en período de desahogo de pruebas tanto de parte del Ministerio Público como de los abogados defensores y una vez concluida esta etapa se podrá determinar la fecha para la audiencia final en la que las partes en pugna darán sus conclusiones del caso y posteriormente dictar la sentencia.
El anestesiólogo De la Torre Buendía está acusado de ser el responsable del severo daño cerebral que sufrió Raúl Medina García, durante una circuncisión a que fue sometido el 28 de junio de 2002 en el Hospital General de Zona No. 16 del Seguro Social, en donde el citado especialista salió del quirófano sin dejar a nadie a cargo del monitoreo del paciente, lo que provocó el accidente anestésico.
En la actualidad, Raúl permanece incapacitado por el daño recibido, sin conocer a los familiares que lo rodean e incluso debe ser alimentado por ellos, además de usar pañales por no tener control sobre sus esfínteres.
De resultar culpable, dijo el juez primero Local Letrado, el médico podría ser sujeto a sanción corporal hasta por cuatro años, por haber incurrido en un delito culposo, pero se haría acreedor a beneficios tales como pena sustitutiva o bien pena intermitente.
En cuanto a la posible inhabilitación de sus ejercicios como médico, reiteró que la petición corresponde al Ministerio Público que deberá hacerla durante la presentación de sus conclusiones en la audiencia final para la que aún no se tiene fecha, aclarando que la sentencia deberá dictarla antes que se cumpla un año, a partir de la consignación del caso.