Con el paso del tiempo, el carpintero imperial, el águila real y el lobo mexicano se han extinguido, otras especies como el oso negro y el venado bura están en peligro
Al menos 16 mil aves acuáticas ?principalmente gansos y patos-, al menos 20 venados cola blanca, así como otras especies como el guajolote, pumas, coyotes y jabalíes en diversas unidades de conservación de la vida silvestre estarán en la mira de los cazadores legales que adquirirán su cintillo de aprovechamiento cinegético a través de la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente.
Sin embargo, la cacería furtiva sigue siendo una realidad en la entidad, así lo han expresado autoridades del Ayuntamiento de Nuevo Ideal, donde se localiza la Laguna de Santiaguillo, la zona de mayor concentración de aves migratorias, así como otras localidades, como San Bernardo, Mezquital, Pueblo y San Dimas, donde hay venado y otras especies.
De acuerdo con datos de la Delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, en el transcurso de este año, se han aplicado seis multas por hechos donde fueron sorprendidos cazadores sin permiso de aprovechamiento, lo que ha generado hasta el momento una recaudación de 48 mil pesos por concepto de multas, además de más de 37 especies aseguradas.
Ante esta actividad, el delegado de la Semarnat, Luis Alfredo Rangel Pescador, sostuvo que es mejor tener un control y esquemas de aprovechamiento sustentable, que permiten la presencia de tiradores furtivos.
De hecho, según datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, en el estado de Durango existen 54 Unidades de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre ?conocidas como UMA?s- con una superficie global de 403 mil 576 hectáreas y distribuidas en más de diez municipios del estado, donde se puede observar la presencia de especies como el venado, puma, lince, jabalí, guajolote, coyotes, patos, gansos, grullas, cercetas, palomas y pequeños mamíferos.
Actualmente, la caza de gansos, patos y otras aves migratorias sólo está permitida en la Laguna de Santiaguillo, en el municipio de Nuevo Ideal, con sus respectivos cintillos, mientras que para el venado existen UMA?s en Pueblo Nuevo, Mezquital, Tepehuanes, Santiago Papasquiaro y San Dimas.
Rangel Pescador explicó que el estado de Durango está clasificado como el cuarto lugar en extensión territorial y con una gran variedad de ecosistemas y biodiversidad, además de que las unidades de manejo representan esquemas alternos de producción compatibles con el cuidado del medio ambiente, frenando o revirtiendo los procesos de deterioro.
CENSO
En el estado de Durango existen al menos cuarenta y cinco especies animales, pero unas como el carpintero imperial desapareció, otros como el lobo mexicano se extinguió, el oso negro está en protección especial, mientras la tortuga del desierto, el trogón orejón y el águila real están amenazadas.
Actualmente especies como los halcones Cara Cara, Cola Roja, Harris y Peregrino, así como la víbora de cascabel, están bajo una protección especial, mientras que otros animales como la codorniz, conejo, liebre, zorra, mapache, tlacuache y zorrillo no están normados, según datos de la Profepa, en tanto que la cotorra serrana y venado bura están amenazados.
TRAS LOS PATOS
Desde el primero de noviembre, la Semarnat decretó abierta la caza de las aves migratorias, con la autorización de 16 mil 095 especies, clasificadas de la siguiente manera: hasta siete mil 995 gansos, seis mil 975 patos y cercetas, 999 brantas y 126 grullas.
Mientras que la ?temporada? del venado entrará desde el 15 de diciembre al 15 de enero del año entrante; luego sigue la del guajolote silvestre.
En términos generales, la Semarnat autorizó 492 cintillos para las aves acuáticas, es decir, que avalan en promedio el sacrificio de 33 especies en promedio; y se estima que se permitirán hasta 25 venados.
Los costos de la cacería de las aves migratorias que llegan a Durango puede ser desde los mil 200 a los mil 800 pesos por cintillo, es decir, por matar o atrapar hasta 33 especies (cifras promedio).
De manera particular, la persona aficionada a la actividad cinegética que sea del estado deberá pagar mil 200 pesos por el cintillo de aprovechamiento, clasificados en 750 pesos para conservación, 350 por predio recorrido y 100 pesos por un guía obligatoria, mientras que el cazador extranjero deberá pagar 600 pesos más.
Rangel Pescador destacó que en esta ocasión intervendrán de manera directa los dueños de los predios con fauna aprovechable y las autoridades municipales, con una medida de mayor control y con la finalidad de evitar la presencia de cazadores furtivos, además de que en este año se contará con la participación de la Universidad Juárez del Estado de Durango.
TURISMO ECOLÓGICO
El jefe del Departamento de Ecología del Ayuntamiento de Nuevo Ideal, Manuel Zurita Chávez, manifestó que el control de la cacería en esta zona no sólo implica evitar lo ilegal en esta actividad, sino que además se pretende impulsar el turismo cinegético, que puede generar una alternativa de ingreso económico para los habitantes que viven en la zona de influencia de la Laguna de Santiaguillo y que tienen predios con fauna aprovechable.
Incluso, sostuvo que los recursos que se obtengan de los permisos de cacería de aves en la presente temporada serán utilizados por la UJED para el mejoramiento de la Unidad de Manejo y Aprovechamiento Sustentable de la Vida Silvestre de la Laguna de Santiaguillo.
Asimismo, Zurita Chávez dijo que los comisariados ejidales, jefes de cuartel y autoridades menonitas, así como la comunidad en general, han sido exhortados para denunciar la presencia de cazadores furtivos.
En otra zona de la Reserva de la Biosfera de Mapimí, se ha observado una franca recuperación del ecosistema, de tal manera que ha crecido la población de tortugas del desierto y coyotes, según un reporte del Instituto de Ecología de Durango; incluso la caza furtiva y los pobladores han puesto mayor empeño en proteger la fauna de esta región.
VIDA SILVESTRE
Las UMA?s que existen en el estado de Durango se localizan principalmente en los municipios de Santiago Papasquiaro, Otáez, San Dimas, Durango, Canatlán, Tepehuanes, Súchil, Nombre de Dios y Tepehuanes, pero prácticamente estos esquemas de sustentabilidad se han reproducido en el resto del territorio estatal.
De acuerdo con datos históricos de la Semarnat, en el 2000 existían sólo once UMA?s que abarcaban una superficie de 46 mil 220 hectáreas y donde se podían observar venados, jabalíes, aves acuáticas, palomas, faisanes, bisontes, avestruces y otras especies exóticas.
A tres años de distancia las unidades de este tipo se han quintuplicado y se ha extendido casi diez veces más la superficie donde hay un aprovechamiento sustentable de la fauna silvestre.
La actividad cinegética, como técnicamente se conoce a la cacería, se ha convertido en una oportunidad de negocio por lo atractivo de este esparcimiento; ciertamente hay más control para proteger el desarrollo sustentable de los predios con presencia de fauna silvestre. Sin embargo, la presencia de tiradores furtivos sigue como un peligro latente.
REALIDADES
Interés cinégético
La riqueza de la fauna del estado de Durango es extensa, y aunque hay destellos de control y protección, el peligro y los excesos de los tiradores ilegales siguen latentes.
En la vertiente de aves, principalmente destaca el afán por cazar gansos, patos, cercetas, grullas, palomas y guajolote.
El grupo de mamíferos que llama más la atención es el de los venados cola blanca y el bura, así como el pécari de collar.
Otras especies, como el puma, jabalí europeo, gato montés, zorra, coyote, ardillón, conejo, liebre y víbora están sujetas a la cacería furtiva o doméstica.
En las aves canoras o de ornato para su venta ambulante destacan el cenzontle, gorrión, cardenal, así como el perico y el loro, especies actualmente bajo restricción para su aprovechamiento.
FUENTE: Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.
ESTADÍSTICAS
Combate a la ilegalidad
En el 2002, el combate a la caza ilegal generó los siguientes resultados:
Aseguramientos Cantidad
Puma 1
Oso 1
Lince 1
Cocodrilo 1
Ganso y cócono 11
Aves canoras 30
Armas de fuego 9
Cartuchos 60
FUENTE: Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.