CIUDAD DEL VATICANO (AP) .-El Papa Juan Pablo II emitió su más fuerte crítica hasta ahora contra una posible guerra contra Iraq, diciendo que el uso de la fuerza solamente es aceptable como "último recurso" y solamente bajo ciertas condiciones.
"La guerra no siempre es inevitable. Siempre es una derrota para la humanidad", dijo el Papa a diplomáticos en el Vaticano en su discurso anual sobre temas de interés para la Iglesia Católica.
Mientras continúa el reforzamiento de la presencia militar estadounidense en el Golfo Pérsico, Juan Pablo II le pidió a los dirigentes políticos emprender acciones para evitar la guerra, diciendo que la guerra sólo dañará a los iraquíes "ya muy afectados" por 12 años de sanciones impuestas por las Naciones Unidas.
"La guerra nunca es una forma para resolver las diferencias entre las naciones", dijo el Papa.
"Como nos lo recuerdan la constitución de las Naciones Unidas y la ley internacional, la guerra no puede ser decidida, incluso cuando se trata de asegurar el bien común, excepto como último recurso y de acuerdo con condiciones estrictas, sin ignorar las consecuencias para la población civil tanto durante como después de las operaciones militares", dijo.
Este fue el más firme mensaje del Papa contra la guerra, así como la primera vez que menciona a Iraq por su nombre desde el inicio de la crisis.
Previamente, en su mensaje de Navidad, el Papa solamente se había referido a las amenazas de la guerra y llamó al mundo a "extinguir los rescoldos humeantes de un conflicto".
Otros funcionarios del Vaticano han sido más explícitos al señalar en recientes entrevistas que una "guerra preventiva" contra Bagdad no tendría justificación moral ni legal y solamente crearía antagonismo entre cristianos y musulmanes.