GÓMEZ PALACIO, DGO.- El Rayo de Jalisco Júnior, una de las principales figuras del pancracio mexicano, visitó La Laguna y demostró el porqué es considerado uno de los consagrados de este deporte y uno de los gladiadores más queridos por los aficionados de todo el país.
Fiel seguidor de la lucha libre tradicional, herencia que le dejó su padre, este enmascarado negro ha logrado sortear los embates de la lucha libre comercial contemporánea, donde la espectacularidad es un elemento atractivo para el espectador y muchas veces llega a desplazar la técnica básica de este deporte.
Pese a ello, el ser parte de un importante grupo de luchadores que gustan de este estilo, le ha permitido continuar su carrera ascendente en forma sólida, sin temor a ser un producto luchístico con caducidad a corto plazo.
No tengo ningún hijo luchador
“Yo quise apoyar a un muchacho nuevo, le presté mi nombre y el equipo, se hacía llamar El Hijo del Rayo de Jalisco, pero de pronto un día se presentó en la Arena México y en plena transmisión del programa se despojó de la máscara y la pisoteó para ponerse una máscara negra y denominarse como el ‘Hombre sin Nombre’, bajo el pretexto de que él quería hacer su propia carrera e imagen.
Aclaró el embajador tapatío de la lucha libre que este elemento no es su hijo, se trata únicamente de un joven al cual se trató de apoyar, sólo que no supo respetar la imagen de un nombre de esta categoría y por sí mismo decidió renunciar al personaje, aunque al parecer sigue aún saca provecho del mismo en forma fraudulenta.
Destacó que después de esta situación, empezaron los problemas de indisciplina por parte de este elemento, debido a lo cual él tuvo que intervenir ante la empresa para que se le diera nuevamente la oportunidad, aunque esta situación se presentó en varias ocasiones, hasta que finalmente se decidió despedirlo en forma definitiva.
“Ahora este muchacho se dedica a cometer fraude en la empresa ‘AAA’ al presentarse como El Hijo de Rayo de Jalisco, lo cual no es correcto; por ello analizo la forma para proceder al respecto, ya que él se está burlando de mí y de un nombre muy importante dentro de la lucha libre. Este nombre es la herencia que me dejó mi padre, y yo, con 28 años dentro de la lucha libre, he trabajado mucho para mantener la buena imagen del Rayo de Jalisco, cuyo personaje tiene 55 años de vida, siempre considerado como uno de los grandes a nivel mundial.
A este personaje todos los aficionados a la lucha libre lo conocen y saben de su seriedad, de ahí que me moleste que este muchacho realice fraude al usar un nombre y equipo que no le pertenecen. Soy el único dueño de los derechos del nombre y si las cosas continúan como hasta ahora, entonces procederé legalmente contra él”.
Dejó en claro que él nunca le quitó el equipo al citado luchador y que la decisión fue del propio gladiador, quien al no guardar el respeto debido al nombre y equipo de este nivel fue reprendido en varias ocasiones, lo cual no toleró y por ello decidió despojarse por sí mismo de la máscara para enfundarse en un equipo negro.
Denunció que en Guadalajara se presentó con “AAA” y cometió la peor tontería que pudo hacer al despojarse de la máscara del Rayo de Jalisco, misma que rompió y pisoteó, para después arrojársela al público. “Ese acto es una total falta de respeto para una de las máscaras más importantes de la lucha libre mexicana y no lo puedo tolerar”.
Destacó que todo este asunto se arreglará en forma totalmente legal para que no queden dudas sobre el procedimiento que se lleve, además de que se buscará hablar con Antonio Peña para que no caiga en situaciones irregulares. “Con el diálogo nos podemos entender, pero si no es así, entonces ya veremos la forma de que así sea”.
No fue accidente, sino una acción premeditada
El Rayo de Jalisco Júnior habló de lo que fue la desafortunada acción suscitada el pasado 13 de abril en la Arena Coliseo de la ciudad de México, fecha en que expuso ante Máscara Año 2000 el campeonato mundial de peso completo.
“Este rival se queja de robo, lo cual nunca ocurrió; quien debería de quejarse soy yo, toda vez que durante la lucha yo sufrí una grave lesión, gracias a que justo cuando me lancé, su hermano Cien Caras me jaló la cuerda y provocó que me fuera a estrellar y que sufriera una importante lesión en la cabeza y la barbilla. La gravedad del problema generó que fuera a parar al hospital y que debiera estar fuera de actividad por varias semanas, lapso en el que tuve que ser sometido a dos operaciones”.
El jalisciense afirmó que él es la pesadilla de “Los Dinamita” y ahora tiene razones de sobra para buscar la máscara de Universo 2000, quien al igual que su hermano Cien Caras, tendrá que pagar. “Esa máscara ya me pertenece, les he demostrado que uno por uno, soy superior a todos; reconozco que en equipo son buenos, aunque siempre se muestran como auténticos montoneros y marrulleros; son fieles exponentes de la rudeza y ni hablar, ese es su estilo y por ello han logrado ser considerados un buen equipo”.
Mi padre, mi mejor pareja
Al recordar a su padre, Rayo de Jalisco, este encapuchado dijo que indudablemente él ha sido su mejor pareja sobre el ring y fue tan grande su entendimiento y éxito como dupla a lo largo de una buena cantidad de años, donde lograron conseguir sonados triunfos sobre rivales de renombre.
En 1984, 1985 y 1986, fueron galardonados al ser considerados como la “Mejor Pareja Nacional”. Pese a acoplarse bien con varios de sus compañeros, Rayo de Jalisco Júnior prefiere trabajar solo, ya que es la forma en que mejor se siente, al poner en práctica toda su capacidad. “Los compañeros de bando y yo, generalmente nos adaptamos bastante bien, pero no como para pensar en formar un equipo especial o duradero, la verdad es que trabajo mejor por mi cuenta, sin sentirme atado a otros”.
Prefiero la lucha libre clásica
“Yo tengo un estilo clásico, muy propio del Rayo de Jalisco, el cual tengo que cuidar, pero al que es necesario hacer ciertas variaciones y adecuaciones, ya que mi peso y estatura son muy diferentes al de mi padre, aunque la esencia en nuestro estilo es la misma.
A mí en lo personal, que he vivido toda la vida de esto, no me gusta la lucha libre contemporánea, prefiero el estilo clásico. No me gusta tanto brinco, vuelos, giros en el aire y otras acrobacias, son muy bonitas y muy vistosas, pero se salen de la esencia. Mi estilo es muy alegre, pero no me salgo de las bases de esta disciplina”, puntualizó el gladiador, quien dijo continuará con su defensa en favor del estilo tradicional.
Reconoció que la nueva lucha es bonita, pero los elementos abusan de estos recursos y terminan por no ser del total agrado de quienes realmente saben de lucha libre, por lo cual sugirió moderar el uso de este tipo de acrobacias.
“Al público conocedor le encanta lo que es la lucha libre a ras de lona, con llaves y contrallaves; afortunadamente ese público sigue vigente y mientras se le dé un espectáculo de calidad, seguirá presente en las arenas”.
Destacó que gracias al cuidado que pone en su trabajo, su estilo de lucha continúa vigente en el gusto de la gente y muestra de ello es la que tuvo el pasado domingo 15 de junio, al exponer ante Máscara Año 2000 el campeonato que ostenta. Este duelo duró 45 minutos y el mismo se desarrolló en su gran mayoría a ras de lona, donde cada uno demostró su real capacidad luchística, con pocos lances hacia fuera del ring, pero una gran cantidad de llaves y candados que mantuvieron el interés del público asistente.
“La gente que conoce sale agradecida de las arenas con este tipo de duelos, pero aquellos que no están muy adentrados, se interesan un poco más al ver este tipo de lucha, donde se puede apreciar quiénes saben realmente de qué se trata este deporte”.
Su historia
Rayo de Jalisco: Surgió en 1951, a la fecha tiene un historial de 52 años dentro de la lucha libre mexicana; es considerada una de las máscaras clásicas del pancracio azteca al lado de otras grandes como: El Santo, Tinieblas, Mil Máscaras, Huracán Ramírez, Médico Asesino, El Solitario, Blue Demon, etc.
Rayo de Jalisco Júnior: Apareció en 1975 y su poseedor mantiene firmes sus convicciones de la lucha libre clásica, lo cual le ha permitido mantenerse vigente como uno de los grandes.
Entre sus preseas obtenidas se destacan:
Campeón Nacional de Peso Completo (12 ocasiones).
Campeón Nacional de Parejas.
Campeón Nacional de Tercias.
Campeón Mundial Semicompleto de la NWA (por tres años), lo cual le valió ser nominado como el “Mejor Campeón Mundial”.
Campeón Mundial de Parejas (Consejo Mundial de Lucha Libre).
Campeón Mundial de Peso Completo (Consejo Mundial de Lucha Libre).
Máscaras ganadas.
En sus 28 años como luchador profesional, este jalisciense ha obtenido un total de 48 máscaras, las que ha obtenido al vencer a igual número de elementos, quienes han tenido la osadía de retarlo con la intención de terminar con una de las principales leyendas de la lucha libre mexicana.
“Todas las máscaras ganadas fueron muy importantes para mí en su momento. Cada contrario tuvo su historia y se obtuvo tras una fuerte rivalidad. En cada caso se tuvo un proceso y se trabajó fuerte para salir adelante”.
Entre las principales están:
Cien Caras (Carmelo Reyes, integrante de Los Hermanos Dinamita).
Súper Halcón.
Egipcio.
Cabelleras
Carlos Plata.
Herodes.
Gran Markus.
Sus mejores parejas
Rayo de Jalisco Júnior y Rayo de Jalisco.
Rayo de Jalisco Júnior y Atlantis.
Su mejor equipo
Rayo de Jalisco Júnior, Ringo Mendoza y Cachorro Mendoza.