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Ciudad del Vaticano.- El papa Juan Pablo II viajará en agosto próximo a Mongolia, un país considerado como "clave" por su ubicación entre Rusia y China, países que el pontífice sigue sin visitar por problemas políticos. El Papa prevé visitar Mongolia a finales de agosto próximo, ante la mejoría de su salud que obedece a una dieta equilibrada, fisioterapia y medicamentos.
La fuente aseguró que ese país asiático, donde el Papa consagrará una nueva catedral, es visto como la antecámara de Rusia y China, dos naciones en las que Juan Pablo II no ha podido poner pie por problemas políticos y por la oposición de los gobiernos locales.
La catedral se encuentra en Ulan-Bator, capital de Mongolia, ubicada cerca de la frontera con Siberia y de Irkust, sede de una de las dos nuevas diócesis católicas en Siberia y que no tiene obispo debido a que Moscú negó el ingreso a monseñor Jerzy Mazur.
La visita de Juan Pablo II a Mongolia sería la sexta gira internacional de Karol Wojtyla para este año, luego de las previstas a países cercanos como España, Croacia, Bosnia, Eslovaquia y Francia.
Petrosillo también se refirió a la mejoría en el estado de salud de Juan Pablo II, quien ha retomado el control de la palabra y se ve menos encorvado desde finales del verano pasado.
De acuerdo con el vaticanista, la mejoría del jefe de la Iglesia Católica se debe a una dieta más equilibrada, al lado de una terapia farmacológica "precisa" y una fisioterapia "multivariada".
En lo que se refiere a la palabra, se informó que Juan Pablo II está bajo tratamiento de un logopedista, aunque reconoció que lo que le resulta difícil aún es caminar.
El pontífice, que en mayo próximo cumplirá 83 años, sufre del mal de Parkinson, y el año pasado debió suspender varias actividades a causa de una artrosis en una rodilla.