El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Proveniente de la capital del país, mañana volará hasta una discoteca de esta ciudad el “Vampiro” más asediado del momento, Óscar, segundo expulsado de Big Brother 2.
Antes de entrar al encierro del gran hermano, dijo que iba a ser más famoso que la Pepsi y que le gustaría ver dentro de la casa un show de lesbianas, pero al parecer, únicamente se hizo realidad su primera declaración.
Por lo pronto, las chicas laguneras podrán “confesar” al “Vampiro” y tratar de convertirse en la mujer de su vida, ya que asegura que a sus 32 años no se ha casado porque siente que aún no ha llegado su verdadero amor, ah, y por otro detalle no menos importante, porque es "más fácil que la tabla del cero”, aseguró en una entrevista.
Óscar Ruiz de Azua salió de la casa de Big Brother el domingo seis de abril, convirtiéndose después de Carolina en el segundo expulsado del concurso.