Por Socorro de la Luz Muñoz
El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Él mismo lo reconoce: ?Me gustan que las cosas salgan perfectas?. Y Prueba de ello, son los andenes del Colegio que lucen impecables, y su oficina donde todo está en orden.
A Jaime Méndez Vigatá no le cuesta trabajo darle un buen ejemplo a sus alumnos pues su quehacer diario lo dice todo. El empresario lagunero asegura que siempre quiso dirigir una empresa, pero nunca se imaginó que sería el Colegio Cervantes, lo cual se dio de manera accidental.
Sin embargo, tampoco negó su vocación de maestro, pues proviene de una familia donde todos están relacionados con la docencia. ?Mi abuelo, Antonio Méndez Vigatá Simó, encabezó a un grupo de maestros exiliados de las Guerra Civil Española, mis tíos, e incluso mi papá, aunque es médico, dio por mucho tiempo clases en la Facultad de Medicina?.
El director del Colegio Cervantes ha hecho que esta institución, presente actualmente un crecimiento exponencial, el cual, cuenta con dos planteles y ofrece educación desde preescolar hasta bachillerato. Como cualquier empresa, una institución educativa cuenta con estándares de calidad, tiene que llevar una buena administración y tener proyectos de expansión.
En la actualidad los proyectos de expansión suman 50 millones de pesos y están próximos a extender las instalaciones del plantel Antonio Vigatá Simó, donde la inversión total representará aproximadamente 30 millones de pesos. Su población en ambas instituciones suman dos mil 160 alumnos.
Pero conozca los detalles de esta entrevista que Méndez Vigatá concedió a El Siglo de Torreón.
n A diferencia de otras
regiones, en La Laguna la educación privada tiene
mucha demanda, y vemos
cómo se abren y cierran
colegios. ¿Por qué se da
esta situación?
La Comarca Lagunera cuenta con un buen número de instituciones educativas, algunas de las cuales ofrecen servicios de calidad, y en general es un mercado muy competido. Por otro lado la mayoría de los padres de familia están íntimamente involucrados en la educación de sus hijos y ellos mismos poseen un perfil que, a diferencia de otras partes de la República, puede ser calificado como alto. La consecuencia de esto es que los mismos padres tienen claro el tipo de educación que desean para sus hijos. Ellos vigilan de cerca este proceso, y desde luego reclaman cuando existe un desfase entre el servicio que se les prometió y el que se proporciona.
n Háblenos un poco
de la historia del Colegio
y su entrada a éste.
Yo provengo de una familia de maestros, el fundador de este colegio fue mi abuelo, el profesor Antonio Méndez Vigatá Simó, él encabezó a un grupo de profesores exiliados de la Guerra Civil Española. Cuando llegó a México un organismo llamado S.E.R.E. (un Comité Técnico de Ayuda a los Republicanos) le solicitó a mi abuelo que formara un Colegio con la intención de darle trabajo a los exiliados. Él ya tenía antecedentes de Torreón, Coahuila, y fue aquí donde en 1940 fundó el Colegio Cervantes. La mayor parte de mis familiares son maestros, mis tíos, mi papá fue médico, pero durante muchos años dio clases en la Facultad de Medicina de la U.A. de C. (Unidad Torreón), mis hermanos son maestros y sin embargo, nunca consideré la posibilidad de hacerme cargo del Colegio. Cuando recién terminé mis estudios en la Universidad Autónoma de México, me incorporé a Básculas Revuelta, ahí estuve trabajando por algún tiempo como jefe del departamento de Ingeniería Industrial. Yo soy Ingeniero Mecánico-Electricista, pero mi abuelo ya se sentía muy agotado, era un hombre de cerca de ochenta años. Él me invitó a trabajar en el Colegio, solicité un permiso en la empresa, con la intención de conocer el trabajo de la educación y me gustó. Actualmente doy clases de matemáticas a dos grupos de tercero de secundaria, además de fungir como director.
n El Colegio Cervantes
además de ser una
institución educativa, es
una empresa sólida. ¿Cómo
empatan estos dos aspectos?
Somos una empresa de servicios cuyo objetivo es formar hombres y mujeres de bien, capaces de contribuir al desarrollo de nuestro país. Para lograr esto es necesario que nuestros alumnos reciban no sólo conocimientos, sino también una formación que les ayude a desarrollar sus talentos y a reforzar su carácter. Como empresa, nuestra labor es sumamente delicada puesto que trabajamos con seres humanos, por lo que ésta se debe llevar a cabo respetando la personalidad y dignidad de los alumnos. Con esto quiero decir que la visión empresarial no está contrapuesta a nuestra misión educativa pues la buena administración y dirección es esencial para conducir de forma eficiente y organizada el Colegio, lo cual repercute de manera directa en la calidad de nuestros servicios.
n Iniciaron ofreciendo sólo
educación básica y
actualmente ofrecen la
preparatoria. Comente
la historia de este proceso.
Si bien es cierto que durante muchos años sólo cubrimos la educación preescolar y básica, desde hace un buen tiempo teníamos la intención de brindar servicios educativos de bachillerato. Esto lo veíamos como una consecuencia lógica, pues por un lado contábamos con la demanda y por otro, siempre hemos tenido la vocación para ello. El problema era que no disponíamos de las instalaciones e infraestructura adecuada para brindar un servicio con la calidad que deseábamos. En 1993 abrimos la unidad Antonio Vigatá Simó y la planeamos para que incluyera la preparatoria, la cual, entró en operación en el año de 1996 con un programa que elaboramos cuidadosamente. En el arranque realizamos una rigurosa selección, tanto del personal docente como del alumnado, con la finalidad de asegurar que nuestros egresados tuvieran el perfil que se requiere para llevar a cabo de manera exitosa sus estudios profesionales.
n ¿Qué hace un director
de un Colegio, como
empresario y educador?
Como empresario, tengo que ver cuáles son las oportunidades y retos que plantea el mundo contemporáneo para dirigir al Colegio hacia aquellas áreas de oportunidades que se presenten. Como educador, debo asegurarme que nuestros egresados cuenten con los conocimientos, valores, habilidades y actitudes que les permitan triunfar en la vida. Asimismo tengo que estar muy de cerca con los padres de familia, alumnos, directores y docentes para recoger sus inquietudes y transmitir nuestra misión para que en conjunto se lleve a cabo.
n Al igual que una empresa de producción en serie,
ustedes guardan un proceso de calidad, eficiencia
y productividad. ¿Cómo
se mide todo esto?; ¿Qué
aspectos son tomados
en cuenta?
Tenemos muy claro el perfil de egreso y los conocimientos que deben tener nuestros alumnos de cada grado. Vigilamos muy de cerca la formación no sólo de ellos, sino también de los maestros. Por otro lado, contamos con un equipo de asesores internos que se encargan de vigilar este proceso y de apoyar a los docentes para que cumplan de una manera más efectiva con su labor. Particularmente, contamos con instrumentos para evaluar el nivel y las características con las que un grupo llega a un grado y de manera continua monitoreamos su avance, lo cual nos permite determinar las áreas por desarrollar, así como la contribución que el docente a cargo está realizando, misma que define su categoría de desempeño. Este es un proceso mucho más fino y delicado que el que se realiza en una industria, pues trabajamos con personas y requerimos, no sólo que los maestros estén alineados con la misión del Colegio, sino que también los padres colaboren con nosotros, además de que nuestros estudiantes tengan el deseo de aprender. Como cada generación de alumnos es diferente, esto requiere más de un proceso fijo, de una estrategia flexible que se adapte a las circunstancias y necesidades de los alumnos.
n También observamos que la mercadotecnia se ha vuelto primordial para la
promoción de los colegios. ¿Cuál es la imagen
que buscan dar?
En nuestro caso, vemos a la publicidad como un medio para informar sobre los servicios que ofrecemos. La intención es dar a conocer lo que somos. Si promoviéramos una imagen que no es real, los padres de familia podrían sentirse, con justa razón, defraudados, es por ello que, bajo un punto de vista de mercadotecnia, buscamos que la publicidad que realizamos corresponda con la realidad.
n ¿Qué papel juega la
educación en el crecimiento y desarrollo de un país?
Después de la Segunda Guerra Mundial tanto Japón como Alemania probaron que la riqueza más grande que tiene un país es su gente. La educación es el medio por el que se puede lograr que las personas tengan el perfil que les permita contribuir al desarrollo del país. Educar es sembrar para el futuro, es brindar a las personas la oportunidad de crecer, de ayudar a otros y de generar riqueza. Un pueblo ignorante es un pueblo pobre.
n ¿Por qué cree que la
educación en México
no sea de primer nivel?
Tal vez el factor de mayor importancia es la formación deficiente que muchos maestros reciben y en muchos casos la inconsciencia de los padres sobre la importancia de que sus hijos reciban una adecuada educación. Por otro lado, incide la falta de vocación de servicio de algunos maestros, que no les motiva a esmerarse en la educación de los niños y jóvenes a su cargo, hecho que se ve incrementado por la ausencia de un sistema de valoración del desempeño que esté enfocado más a resultados, que a la acumulación de estudios. También falta, a nivel profesional y técnico, un mayor acercamiento con las empresas, de manera que se asegure, un perfil de egresados que cubra con los requisitos del mercado laboral. Otro factor es la gran extensión del territorio nacional y la incomunicación en que se encuentran muchas de las comunidades rurales, lo cual implica un enorme esfuerzo tanto de tipo económico como humano para llevar las escuelas a muchas de ellas.
n ¿Qué aspectos debe retomar la reforma educativa para que se dé un crecimiento
económico?
En primer lugar debe cuidarse la calidad, pero también se debe incluir una formación humana que haga conscientes a los jóvenes de la trascendencia que tiene la escuela en su vida laboral, para que aborden con entusiasmo su propia educación y se comprometan a luchar siempre por mejorar.