14 octubre 2003
Naciones Unidas, (EFE).- Alemania, Francia y Rusia presentaron hoy algunas enmiendas al proyecto de resolución sobre Iraq y manifestaron un relativo optimismo en cuanto a la posibilidad de que el Consejo de Seguridad de la ONU llegue a un consenso.
El proyecto de resolución no representa "un cambio fundamental" en la posición de la coalición que ocupa Iraq, según el secretario general de la ONU, Kofi Annan, aunque tiene en cuenta algunas de sus preocupaciones.
Tanto Annan como los países que más objeciones ponían al texto hicieron comentarios positivos y negativos sobre este último borrador, que Estados Unidos pretende someter a votación el miércoles.
Las delegaciones creen que si se da un poco de tiempo, será posible llegar a un acuerdo antes de la conferencia de donantes para Iraq que se celebrará el 23 y 24 de octubre en Madrid.
Sin embargo, ahora depende de la flexibilidad y la disposición a introducir cambios que muestren los patrocinadores del texto: Camerún, España, Estados Unidos y el Reino Unido.
La iniciativa tiene como objetivo crear una fuerza internacional para estabilizar Iraq, que estaría bajo el mando único de EU, y lograr apoyo financiero para la reconstrucción del país, así como definir mejor y reforzar el papel de la ONU.
Annan, quien criticó muy duramente la versión anterior del proyecto y ha retirado a casi todo el personal internacional de Iraq por motivos de seguridad, hizo comentarios que reflejaban decepción por un texto que no responde a sus expectativas en lo que respecta a la soberanía y el traspaso de poderes.
No obstante, manifestó su disposición a implementar "cualquier resolución que el Consejo de Seguridad pueda adoptar, teniendo en mente las limitaciones que todos conocemos".
Las enmiendas presentadas hoy tienen por objetivo "clarificar" algunos de los puntos contenidos en el documento sobre "temas de principio" que ya están reflejados "de una forma u otra" en el texto, según el embajador de Rusia ante la ONU, Sergey Lavrov.
En declaraciones a la prensa al término de una reunión a puerta cerrada, Lavrov estimó que el proyecto "se mueve en la dirección adecuada", aunque "algunos de los elementos cruciales para el éxito de los debates del Consejo de Seguridad no están muy claros y algunos de ellos son ligeramente ambiguos".
El diplomático señaló que algunas enmiendas han recibido una respuesta favorable de los patrocinadores, por lo que no debería ser difícil incorporarlas. Entre los puntos ambiguos mencionó el momento en que terminarán realmente todas las responsabilidades de la Autoridad (las potencias ocupantes) en Irak.
Los patrocinadores plantean que antes de que se elija el nuevo gobierno iraquí, habrá "una evolución de las responsabilidades sobre el terreno", pero Alemania, Francia y Rusia quieren que se articule mejor el punto, explicó.
También desean que se creen instituciones iraquíes adicionales a las estructuras actuales a medida que éstas evolucionan.
Los tres países creen que el plazo para la presentación de un calendario para la elaboración de la Constitución y la celebración de elecciones debe ser objeto de negociación y que el Consejo de Seguridad debe considerar la agenda, y no ser solamente informado de la misma.
En relación con el proceso Constitucional, Lavrov subrayó la importancia de que incluya esfuerzos para construir el consenso y promover el diálogo nacional, de manera que participen las diferentes fuerzas políticas en Iraq y no sólo las estructuras actuales.
En su opinión, el mandato de la fuerza internacional debería expirar el día en que se elija un nuevo gobierno y preste juramento, sin que esto impida que el Consejo considere cualquier petición de asistencia del Gobierno de un Iraq independiente y soberano.
Los miembros del Consejo podrían volver a reunirse cuando concluya el debate público que celebra hoy sobre la situación en Oriente Medio, aunque el elevado número de oradores podría obligar a posponer las consultas hasta el miércoles.