GÓMEZ PALACIO, DGO.- Con todo y niños, mujeres y padres de familia del fraccionamiento Miravalle y otras colonias aledañas al establo “Erasun”, se plantaron ayer en la entrada a los criaderos e impidieron el acceso a los camiones que, aseguraron, seguían llegando cargados de reses pese a la clausura definitiva.
Inconformes por el nuevo plazo que el Gobernador dio a la empresa para retirar las miles de cabezas de ganado que ahí permanecen y que vence el 15 de junio, el grupo de vecinos del establo reclamaba que la reubicación de los animales se hiciera en forma inmediata, de acuerdo con lo que les habían dicho voceros de la Presidencia Municipal, en el sentido de que ayer mismo se solucionaría el problema.
Josefa Aguilar dijo que también estaban demandando la presencia de la alcaldesa Leticia Herrera de Lozano, quien según aseguró, les había prometido estar ahí a las diez de la mañana, aunque poco después de esa hora la Presidenta Municipal formaba parte de un acto de entrega de apoyos para el medio rural en las instalaciones de la Expo Feria.
“Ella vino ayer (miércoles) a las dos de la tarde y nos dijo que estaría aquí y creo que debe tener dignidad y respeto por nosotros porque a pesar de lo que somos, necesitamos que nos atienda..” expresó la madre de familia.
Mientras las mujeres daban a conocer su enojo, dos inspectores de la Dirección de Salud Municipal se mantenían expectantes de la manifestación y después uno de ellos fue jaloneado para obligarlo a que se quedara, pues reiteraban en que continuarían ahí hasta que el establo quedara vacío, pero necesitaban el respaldo de la autoridad.
Sanjuana Coronado Morán, vecina de la colonia El Mezquital, dijo que en el transcurso de la mañana habían visto llegar cuatro camiones llenos con reses y apenas había salido uno con los animales que serían llevados al sitio de reubicación.
Insistieron en que por las noches se sigue formando una densa nube de polvo de estiércol que aún genera molestias y enfermedades de tipo respiratorio.
María Torres Alderete, de Miravalle, dijo que los trabajadores que compraron una casa en ese sector fueron defraudados porque nunca se les advirtió de la presencia de ese foco de contaminación.
“Mi hijo es asmático y nos venimos de Lerdo a vivir aquí huyendo de los viveros porque le hacían sentirse mal, pero la solución fue contraproducente”, expresó.
Molesta al gerente revisión y labor informativa
Juan José Córdoba Herrero, gerente de la empresa “Erasun”, S.A. de CV, ofreció su versión: calificó como una “gran mentira” lo dicho por los vecinos inconformes en el sentido de que seguían ingresando cabezas de ganado al establo, pues según aseguró, eran animales de otras empresas que pretendían sacrificarlos en el rastro que ahí opera.
El acta número 1209 levantada por verificadores de la Jurisdicción Sanitaria número Dos el pasado 27, indica que Córdoba les había manifestado tener de plazo hasta el 15 de junio para el retiro definitivo de los animales, esto a pesar de que el miércoles 21 que se efectuó la clausura, el titular de la dependencia, Salomón Olvera Leyva, aseguró que no habría más prórrogas.
Aunque la idea era obtener otro mes de plazo, el gobernador Ángel Sergio Guerrero, en la visita que realizó en días pasados a Gómez Palacio, concedió una audiencia a Juan José Córdoba y le fijó como fecha límite el 15 del próximo mes.
El establero aseguró que el ganado salía paulatinamente y era reubicado a otra propiedad localizada en el kilómetro cinco de la carretera Brittingham-Dinamita, a un costado del autódromo, donde ya se tienen mil 900 reses de las cuatro mil 200 que permanecían en el establo “Erasun”.
Sin embargo, impidió el acceso a las instalaciones del rastro, en el que al igual que el establo, también se suspendieron temporalmente las actividades hasta cumplir con una serie de recomendaciones de tipo sanitario.
“Yo quise decir lo que quería, pero veo que sus tendencias son otras y no tengo por qué arriesgarme, ya me han pasado muchas cosas”, respondió para tratar de justificar su negativa a mostrar el sitio de matanza.
También se mostró molesto cuando el titular de Regulación Sanitaria, Rafael Monárrez y el director de Salud Municipal, Alejandro Tapia Reyes, acudieron hasta la parte trasera del establo para comprobar que no estaban ingresando animales, como aseguraban los vecinos.
“¿Cómo creen que voy a estar jugando con una inversión tan grande?, pues pásenle para que vean que no hay nada”, fue la respuesta.
Retiro Inmediato
De dos a tres días se redujo el plazo máximo para que todas las cabezas de ganado que permanecen en el establo “Erasun” sean retiradas, informó por la tarde el titular de la Jurisdicción Sanitaria número Dos, Salomón Olvera Leyva.
Aunque el Gobernador le concedió a Córdoba Herrero hasta el 15 de junio, el plazo fue condicionado a que esto no generara conflictos de tipo social, tomando en cuenta el antecedente de las manifestaciones y protestas que han realizado los vecinos desde hace cuatro años.
Con lo sucedido con los vecinos de Miravalle y colonias ubicadas en torno del criadero, ayer se tuvo esa instrucción por parte de la Secretaría de Salud del Estado.
Al decir de Olvera Leyva, hasta entonces se habían aplicado tácticas dilatorias por parte de los encargados de la empresa para prolongar el retiro, pues cada animal es sometido a aplicación de vacunas y pesaje antes de ser introducido a los trailers o “panzonas” que los trasladan.
Aunque se contemplaba la necesidad de que el Municipio apoyara la agilización del procedimiento, gestionando o aportando los vehículos, se concluyó que la empresa “Erasun” cuenta con camiones suficientes para transportar las reses.
Salomón Olvera dijo que se vigilaría la salida de animales, que en promedio por día es de 300 a 400 cabezas, hasta vaciar los corrales.
Por su parte, el director de Salud del municipio, Alejandro Tapia Reyes, dijo que su presencia fue únicamente para apoyar las acciones de la Jurisdicción Sanitaria.
El rastro permanecerá
Tras el retiro definitivo de las cabezas de ganado del establo “Erasun”, el rastro continuará operando en medio de sectores habitacionales, aunque sus instalaciones permanecen clausuradas temporalmente al igual que los corrales de engorda, hasta que no se cumplan las recomendaciones sanitarias.
· El pasado día 21, los verificadores sanitarios clausuraron el sitio utilizado en el sacrificio de las reses y días después se fijó un plazo de diez días que vence el seis de junio, para el cumplimiento de las recomendaciones, por lo que el rastro no debía estar operando.
· Agua de mayor calidad e higiene diaria del área física; mejorar las condiciones de paredes y pisos; fumigar para eliminar la fauna nociva; mejorar los utensilios y recipientes en que se desechan las vísceras no útiles y que el personal opere en mejores condiciones y utilice herramientas de trabajo adecuadas, son las principales instrucciones.
· Semanalmente ingresa un promedio de 700 reses para su sacrificio.
FUENTE: Investigación El Siglo de Torreón