Blanco o negro... nunca gris
Nos recibe en “La Nogalera”. Discreto, sencillo, sagaz y muy astuto, poseedor de una inteligencia admirable. A él nadie lo hace tonto: los colmillos no lo dejan caminar. Estoy ante un hombre plagado de claroscuros, matices, pasadizos y una mente que siempre trama, se anticipa a los acontecimientos. Esta charla no es juego de niños…
SIGLO: Usted me dijo hace poco algo muy importante: quiero ser franco y hablar, redimirme. ¿Qué persigue con ello?
Ese día que usted y yo nos encontramos le mencioné que durante mucho tiempo he sido calumniado, difamado, vilipendiado por algunas gentes, por algunos medios de comunica-ción ante los cuales no he querido acceder a sus pretensiones; como quiera que sea ese tipo de calumnias perjudican, lastiman.
SIGLO: Hay hombres de todos matices: blanco, negro y gris. ¿Cuándo es Carlos Herrera blanco, cuándo negro y cuándo gris?
Yo soy blanco o negro, pero jamás gris. No creo en las medias tintas; los hombres ni somos negros del todo ni somos blancos del todo.
SIGLO: Dígame de qué se arrepiente usted, su error garrafal, aquello que cambiaría
Haberme metido en la política
SIGLO: ¿Por qué?
Porque de ahí nacen los intentos de soborno, de chantaje, eso ha perjudicado a mi familia, nos entristece, nos duele que una vida de trabajo y de esfuerzo se vea empañada por ciertas gentes que creen que la mala política debe ser negra.
SIGLO: ¿A usted qué le significa ser hombre de campo, visitar sus ranchos, esos parajes donde probablemente se sienta libre ante la vida?
Primero que nada salud, ahí se me acaba el estrés y eso fue lo que me enseñó mi padre, entonces así he seguido. El origen del hombre es la tierra y yo ahí me siento muy bien.
SIGLO: Usted siempre ha estado en el ojo del huracán, característica de los hombres exitosos. ¿Por qué los que lo aman lo hacen con tal fervor y aquéllos que lo odian llegan a límites inimaginables?
Soy amado por los que me conocen, mi familia; sin embargo, yo nunca he hecho daño a nadie como para que me odien tanto.
Forma es fondo. Amabilidad hacia sus empleados: lo ven con una mezcla de respeto y admiración, miedo, pues no se anda con cuentos.
SIGLO: A Carlos Herrera se le conoce por su ayuda a los demás y una satisfactoria labor como político y empresario. ¿Cómo separar el ámbito político del empresarial?
La función suprema del ser humano es servir a sus semejantes, no existe otra cosa que cause una satisfacción mayor. Cuando usted ha tenido éxito en los negocios le duele ver la miseria en la que se debate mucha gente; reitero: mi error fue haber aceptado los puestos públicos.
SIGLO: Usted me dijo estar en el ocaso de sus días y yo ésa no se la creo, lo veo fuerte como un toro. ¿Cuáles son sus planes a futuro? ¿La gubernatura de Durango? Sus ambiciones políticas son evidentes.
Eso es otra cosa, estoy arrepentido por una sola razón: el temor a que llegue a puestos de elección popular porque no me presto a muchas cosas. Yo estoy peleando porque mi partido me nomine candidato.
SIGLO: Dicen los que lo conocen que usted sabe ser muy buen amigo de los amigos e implacable con los enemigos…
No están equivocados, así es: amigo de mis amigos así hagan lo que hagan siempre y cuando no caigan en cosas deshonestas y reprobables. Cuando se necesita ser enemigo de alguien hay que ser implacable.
SIGLO: ¿A usted le deben muchos favores?
Muchas gentes…
SIGLO: ¿Y los cobra?
A quien me los paga se los acepto con gusto y a quien no, pues me doy por bien servido.
SIGLO: ¿En qué piensa Don Carlos cuando se va a la cama a descansar?
Después de tanto trabajo físico y mental el cansancio no me deja pensar mucho; afortunadamente duermo muy bien.
SIGLO: Muchos se cuestionan qué aprende Leticia Herrera de usted, pero ¿Qué le ha enseñado a usted su hija?
Estoy muy sorprendido de ver cómo se ha desempeñado en esta difícil tarea que le tocó de representar a los gomezpalatinos. Yo no esperé que saliendo de la cocina fuera hacer la labor que está haciendo. He aprendido a que las mujeres tienen carácter, sensibilidad social, muchas cualidades. Bien dice por ahí una señora protagónica que México está listo para ser gobernado por una mujer.
SIGLO: ¿Y qué opina usted de esa señora protagónica (Marta Sahagún) y sus comentarios?
Que todavía no es tiempo.
Le pregunto a Carlos Herrera por Madrazo: dice admirarlo por género, por democratizar al partido y manejar una inmensa deuda pública. A pesar de lo anterior asevera haber apoyado a Beatriz Paredes. Sus palabras suenan lógicas: si quiere la nominación para Durango ¿cómo diantres se atrevería a hablar mal de él?. Don Carlos es cuidadoso en las formas, yo en cambio asevero que Roberto Madrazo representa lo peor, lo sucio, la mentira y el doble mensaje.
DON CARLOS ES CONTUNDENTE: “Creo en Carlos Salinas de Gortari, desecho lo que la nomenclatura le atribuye. Él no fue el responsable de tanta cosa que le achacan. Extraordinaria, excelente, su labor a mi juicio”.
SIGLO: ¿Cuál es su miedo más hondo?
La partida de un ser querido antes que yo, prematuramente.
SIGLO: Luis Echeverría dice que no puede controlar ni a sus nietos. Yo he presenciado actos de abuso de poder por parte de los suyos, Don Carlos ¿Qué les recomendaría hacer?
Todos los días les he manifestado que las escoltas tienen un sólo fin, el evitar un secuestro, es muy difícil hacerlos entender y pensar que dichas personas no están ahí para cometer abusos, sino ampararlos. Estoy enterado de esos hechos y cada vez les impongo castigos más severos.
CARLOS HERRERA ES CONTUNDENTE: Si no llego al gobierno del Estado jamás volveremos a estar en un puesto público, ni Leticia ni ninguno de mis hijos.
Cierto: a los Herrera los dejarían de molestar al salir de la arena política. Sin embargo, además de “servir a la comunidad”, seguramente podrían extrañar el poder, bien definido por Henry Kissinger, como “El afrodisíaco más poderoso del mundo”
SIGLO: ¿Dentro de las acusaciones que le han hecho cuál de todas le ha dolido más?
La de narcotráfico -desde hace treinta años- por la coincidencia del apellido con otras gentes del sur del Estado. Mi manera de ser, piporro, hablador y peleonero.
SIGLO: ¿A quién le ve tamaños para la grande, el 2006? PRI, PAN Y PRD.
Todos los partidos están desprestigiados. Yo veo que en nuestro partido podría ser Roberto Madrazo o Manuel Ángel Núñez Soto de Hidalgo. En el caso del PRD obvio: López Obrador. El PAN no tiene gallos
SIGLO: ¿Cómo ve la actuación de la anterior Legislatura y qué perspectivas estima ofrezca la nueva?
La anterior legislatura no sacó ni una sola de las reformas estructurales que tanto necesita México; fueron pleitos partidistas, personales, excesos de la democracia: Salgado Macedonio, Pancho Cachondo, Irma Serrano y gentes que son un circo y denigran a un Congreso.
Yo espero que ahora dejen atrás los pleitos y se pongan a trabajar…
Carlos Herrera ve peligroso el pleito, la franca división entre Roberto Madrazo y Elba Esther Gordillo, pues divide a México. Sobre la popularidad de Andrés Manuel López Obrador, estima que ésta se debe a su sensibilidad, a que habla poco y por ello no se equivoca, tantas cosas que ha hecho.
FRASES DE HERRERA:
***El río Nazas lejos de dividirnos debería unirnos: lo que afecta a Torreón, afecta a Lerdo y a Gómez.
***Me gustaría ser recordado como un hombre justo.
***La relación con Cuba se deterioró por la actuación del ex canciller Castañeda. Castro se aprovechó de la buena fe del Señor Presidente y eso no lo perdono. El Comandante es un sáprata como lo fue Pinochet. Debemos apoyar a Cuba, jamás a su gobierno, debemos estar con el débil.
Damos término a la charla, pues Carlos Herrera se tiene que ir “a hacer quesos”. Se le olvidó mencionarnos otros pendientes para esa tarde: hacer política, pues a pesar de afirmar aborrecerla, vive, respira, transita por sus venas.
Salgo agradecido: platicar con él es toda una aventura, le aprendo cosas valiosas, también por ser algo Maquiavélico.
¿Quién le quita las mil máscaras al actor?
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