Además del sueldo que reciben los trabajadores, el empresario gasta otro 32% del salario para darlos de alta en el Seguro
Es irregular lo que está haciendo el Instituto Mexicano del Seguro Social en Durango, al negar la afiliación o reafiliación de trabajadores con un salario mínimo, opinó el Colegio de Contadores Públicos de Durango. Además –agrega el organismo-, para las empresas es pesado pagar el sueldo a sus empleados y casi un 32 por ciento adicional al IMSS.
Consideró que atemoriza a los contadores y a los patrones pidiéndoles las nóminas y contratos a cambio de aceptar el nuevo trámite, cuando el empleado a dar de alta en el Seguro no puede aparecer todavía en el registro laboral de una empresa, porque no ha sido dado de alta ni ha firmado nómina alguna.
María de Lourdes Nápoles Orrante, presidenta del colegio, manifestó que en el gremio se empezaron a enterar de que implementó esa postura el IMSS luego de que profesionistas socios y no asociados del colegio lo reportaron a la dirigencia del mismo a manera de comentario.
Sin embargo, dejó claro que, al comprobarlo, le extrañó el hecho de que el Seguro Social de repente ya no le cree a los patrones ni a los profesionistas que en lugar de éstos hacen los movimientos afiliatorios.
Nápoles Orrante indicó que el instituto está actuando en contra de la ley, porque el patrón manifiesta lo que es y lo que corresponde al trabajador de mutuo acuerdo, y la autoridad lo único que ocasiona es atemorizar para, a través de esa intimidación, tratar de lograr su objetivo.
El IMSS –dijo María de Lourdes- quiere resolver una situación que posiblemente se esté dando en algunas empresas, respecto de la afiliación de trabajadores con un salario mínimo o un ingreso inferior al que en realidad perciben de parte del patrón. Pero probablemente no sabe de la crítica situación que atraviesan las empresas y los empresarios.
“Sí se dan casos en los que el patrón les aumenta en términos reales sus ingresos a los empleados, mediante estímulos, gratificaciones y promociones por productividad, puntualidad y otras aptitudes demostradas en el área laboral; sin embargo, eso lo permite con sus limitantes la ley”, explicó la lideresa de los contadores de Durango.
La situación de las unidades empleadoras debería ser revisada por instituciones como el Seguro Social, a fin de que se vea la importancia de las empresas y lo que provocaría el cierre de las mismas por causa de los sistemas de recaudación de las autoridades.
No aceptan
Nueva Vizcaya Profesionistas le volvió a recordar a las autoridades locales del IMSS que están violando su propia normatividad.
En ella se contempla que la afiliación o reafiliación de trabajadores puede ser como piso con un salario mínimo general vigente en la localidad, y como techo con 25 salarios mínimos vigentes en el Distrito Federal.
Ante esa situación, la agrupación de profesionistas –que agremia incluso a contadores públicos- reiteró que la ilegalidad no se puede disfrazar de legal, ni tampoco el terrorismo fiscal se puede aplicar con el argumento de que el objetivo deseado es más benéfico que el instrumento para lograrlo.