Un dólar superior a los 11 pesos perjudica a Durango, pues es un estado que importa más de lo que exporta, asentó el presidente de Coparmex, Gilberto Sánchez Rodríguez.
“La devaluación del peso frente al dólar es un instrumento que sin duda a algunos les beneficia, les da más rentabilidad, como son las empresas exportadoras, pero creo que en el caso de Durango el beneficio es mínimo, pues se compran más insumos de los que se venden al exterior”, amplió el líder de los empresarios.
La mayoría de empresarios se verán en la disyuntiva de aumentar el precio de varios de sus productos o dejarlo igual para no afectar a sus clientes, pero en este último caso tendrían que perder parte de las ganancias y tener menos utilidades.
El hecho que el dólar se mantenga por encima de los 11 pesos es negativo para Durango, puede frenar la economía, disparar la inflación o causar una inflación en cascada. Ante esto, se debe tener mucho cuidado porque incluso podría generar desempleo si las empresas se ven menoscabadas en sus ingresos.
De seguir así, la meta inflacionaria del 3 por ciento para este año sería prácticamente imposible de alcanzar y se tendría que pensar en 4 ó 5 por ciento.
Consideró que la paridad del dólar se debe a la libre fluctuación y factores externos, nunca a una culpa del gobierno federal, por lo que es positivo que no se trate de controlar con cortos excesivos del Banco de México o la venta masiva de dólares. Auguró que el dólar volverá a una paridad de 10.50 pesos por unidad.