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NOGALES, Ver.- Funcionarios de Petróleos Mexicanos (Pemex) garantizaron el abasto de combustible a todo el centro del país, a pesar de que fueron cerradas las válvulas de cinco ductos de la paraestatal, como consecuencia de la explosión registrada este jueves en esta región.
Sin embargo, el director de Pemex-Refinación, Juan Bueno Torio, advirtió que si en cinco días no logran reparar los dos ductos averiados por la explosión, podría haber problemas en el abasto de hidrocarburo hacia las refinerías de las distintas partes del país.
“Tenemos suficientes inventarios para mantener las plantas en operación, aunque a menor capacidad, sin embargo si esto se nos alarga más de cinco o seis días la reparación entonces ya podremos tener problemas serios de falta de suministro de petróleo crudo a las refinerías”, reconoció el funcionario federal.
Momentos después de que participara en una reunión de evaluación sobre el accidente ocurrido a las orillas de la carretera federal México-Veracruz, insistió que no habrá desabasto de combustibles porque “tenemos un inventario suficiente” de 12 millones de barriles.
Explicó que el ducto de 34 pulgadas que resultó con un corte importante, trasladaba hacia el Distrito federal 200 mil barriles diarios; mientras que el segundo que no se fracturó tiene algunos desperfectos y dejó de transportar 179 mil barriles diarios de hidrocarburo.
Y aunque Petróleos Mexicanos cerró las válvulas de cinco ductos que transportaban gas licuado y natural, petróleo y gasolina, el Director Corporativo de Seguridad Industrial y Protección Ambiental de Pemex, Rafael Fernández de la Garza, garantizó el abasto de combustibles en el centro del país.
El funcionario de la paraestatal se negó a adelantar que Pemex vaya a pagar indemnizaciones a los afectados por la explosión de dos de sus ductos provocada por un alud de lodo del Río Chiquito, misma que carbonizó tres trailers, un camión de volteo y al menos una docena de negocios y viviendas.
Alrededor de un millar de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), de corporaciones de auxilio, policías locales y federales laboran en los municipios de Nogales, Ciudad Mendoza, Maltrata y Acultzingo, donde se registró la víspera una explosión de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), causada por el desbordamiento del río Chiquito.
Ayer por la mañana, el gobernador Miguel Alemán y funcionarios del Consejo Estatal de Protección Civil recorrieron por vía aérea y terrestre la zona para evaluar los daños provocados por las intensas lluvias ocurridas la tarde y noche de este jueves en las faldas del Pico de Orizaba que dejaron como saldo al menos cuatro personas muertas y 28 desaparecidas.
Las lluvias de las últimas 12 horas provocaron que el río Chiquito, que desciende al valle de Orizaba, se elevara dos metros sobre su nivel normal y en un lapso de tres horas arrastró piedras, lodo y árboles que a su vez fracturaron ductos de Pemex y ocasionaron la explosión.
El gobernador Miguel Alemán Velasco, informó que desde las 09:00 horas de ayer se dispuso el cierre de la autopista Veracruz-México, a la altura de la caseta de Fortín, a fin de que las cuadrillas de rescate auxilien a la población damnificada y controlen las fugas de gas y gasolina que todavía se registran en la zona.
La primera evaluación de los daños provocados por las lluvias presentadas hoy establecen que al menos tres personas perdieron la vida, dos ahogadas y una por infarto, además de 56 lesionados, entre ellos cuatro personas quemadas de gravedad que fueron trasladados por la madrugada a la capital del país para su atención médica.