El aspirante a dirigir el Sindicato de Trabajadores al Servicio de los Tres Poderes del Estado de Durango, Sergio Quiñones Castrellón, quien encabeza la planilla Negra, indicó que esperan que esta misma semana se defina este conflicto, fijando la fecha para llevar a cabo una tercera elección.
Quiñones Castrellón reiteró su disposición de mantenerse al margen de la ley en este conflicto y que sean las autoridades correspondientes quienes decidan sobre los cauces que deben seguirse, pero de manera especial el hecho que el Gobernador del Estado de nueva cuenta ya se reincorporó a sus actividades.
Destacó que si bien el sindicato es autónomo, es muy importante que pueda contarse con la intervención del Ejecutivo para que actúe como mediador en este conflicto, toda vez que existe una posición cerrada de la gente que encabeza Raquel Bretado y Beatriz Rodríguez para acudir a una tercera elección y que sean finalmente los propios agremiados los que decidan quién debe presidir su próximo Comité Ejecutivo.
Por lo anterior, consideró que esta misma semana deben definirse algunas situaciones, como que el Tribunal de Conciliación y Arbitraje dé a conocer si es competente para conocer del caso, ya que se ha insistido en que no pueden intervenir en la vida interna de los sindicatos, pero una respuesta oficial podría agilizar las cosas en busca de una solución a este conflicto.
Recordó que por parte de la planilla Negra existe la disposición de resolver de la mejor manera este conflicto y una salida digna sería la de una tercera elección, la cual inclusive daría la legitimidad correspondiente al comité que sea electo, esperando que esta misma semana se pueda toar una decisión al respecto.
Con relación a la posición que ha asumido la secretaria general aún en funciones de dicho sindicato, Raquel Bretado Reyes, de que ya todo se encuentra definido, y que la nueva secretaria general será Beatriz Rodríguez y que solamente esperan el reconocimiento oficial del Tribunal de Conciliación y Arbitraje, advirtiendo que no habrá una nueva convocatoria y que Sergio Quiñones no puede ser dirigente por contar con antecedentes penales.
Quiñones Castrellón señaló que es precisamente donde se requiere la intervención de una autoridad que ayude a mediar las posiciones de ambos grupos y evitar que se polaricen, de ahí la necesidad de una tercera elección y que la base trabajadora sea la que decida, esperando que esta misma semana se tengan acuerdos al respecto.