En el marco del proceso de consulta realizado por el Ayuntamiento de Durango con motivo de la propuesta de la ampliación de horarios para la venta de bebidas con contenido alcohólico, la Cámara de Comercio se pronunció a favor por considerar que una eventual reducción “generaría una predisposición a más compra y consumo de bebidas con contenido alcohólico”.
El estudio presentado el año pasado cuando estaba al frente de la Canaco Eleazar Gamboa Silva establece que al disminuir de horarios se ponía en riesgo el ingreso de las discotecas en cuanto al “cover”, pues la gente no estaría dispuesta a pagar dicha cantidad por cuestiones e interpretación a la nueva disposición, es decir, “no querrán pagar por permanecer sólo una hora dentro del establecimiento”.
Sostiene que la disminución en horario genera el riesgo de que “la clientela en general se traslade a otros sitios, por ser la noche relativamente joven, dando pie a que permanezcan más tiempo en el vehículo consumiendo alcohol y poniendo en riesgo su seguridad y la de terceros, ya que estarían circulando en estado indispuesto aunado a que se desplazarán a lugares determinados dentro de la mancha urbana buscando diversión”.
En la argumentación a favor de una ampliación de horarios en la operación de discotecas y centros nocturnos, establece que “es por eso preferible que la clientela permanezca cautiva en un solo lugar, mismo que está diseñado y destinado para atender y cuidar a estos jóvenes y de esa manera permitirles que tengan un esparcimiento y una recreación digna y sana, dando pie que bajo el estímulo de la música la gente se incite a bailar y de tal forma metabolice el alcohol ingerido, gaste sus energías, y se traslade directamente a sus casas después de salir del lugar”.
Colateral a lo anterior, desarrollaron una propuesta de reglamento para la seguridad, control y protección de la vida nocturna de Durango, que contempla, entre otras cosas, que la infraestructura básica sea supervisada por Protección Civil; cada establecimiento debe contar con medidas de seguridad extremas como extinguidores y salidas de emergencia con sus debidos señalamientos, barras de pánico en las puertas de salida, etcétera.
Incluye en su propuesta aspectos que tienen que ver con el personal de seguridad debidamente capacitado; la implementación de campañas contra las drogas; la realización de campañas de buzón de denuncia anónima, que consiste en la colocación de un “buzón” dentro de las instalaciones para cualquier tipo de señalamiento en materia de distribución de estupefacientes dentro del establecimiento.
Se apunta que además de lo anterior, sería positivo la implementación de tres campañas adicionales, que tienen que ver con la ubicación de retenes estratégicos para garantizar la seguridad de los conductores; otra relativa a los conductores designados, y una tercera para prevenir la entrada de menores a este tipo de recintos.