Reuters
GINEBRA, Suiza.- Uno de cada tres consumidores estadounidenses está preparado para boicotear los productos franceses y alemanes por la oposición de esos países a la guerra contra Iraq liderada por Estados Unidos, según un sondeo publicado ayer.
El sondeo también mostró que los ciudadanos de Estados Unidos están más enojados con Francia que con Alemania.
El 43 por ciento de los entrevistados dijo que era menos probable que compren productos franceses que alemanes. Sólo el 36 por ciento se pronunció en contra de los productos de Alemania.
El sondeo, organizado por Weber Shandwick, una de las agencias de relaciones públicas más importantes del mundo, siguió a otro hecho a principios de esta semana que reveló que, como promedio, el 12 por ciento de las personas en Francia, Alemania y Gran Bretaña dejaría de adquirir productos estadounidenses.
“La guerra puede haber terminado, pero los consumidores, especialmente los de Estados Unidos, no están listos para el desarme”, dijo el presidente de Weber Shandwick, Jack Leslie, sobre los resultados del sondeo.
“Hoy, los consumidores de Estados Unidos están más inclinados a demostrar con su bolsillo que con una manifestación. Para las empresas y firmas europeas, el impacto de estos sentimientos se sentirá antes de que se vea”, añadió.
El último sondeo se hizo por teléfono e involucró a 1,000 personas en Estados Unidos.
Weber Shandwick publicó el miércoles los resultados de su sondeo en las tres naciones europeas y manifestó que los sentimientos antibélicos entre los consumidores de Francia, Alemania y Gran Bretaña podrían significar la pérdida de miles de millones de dólares para empresas estadounidenses.
La agencia advirtió a los hombres de negocio de Estados Unidos en el extranjero que dejaran de usar los símbolos nacionales en el comercio y destacaran su contribución a la sociedad de los países donde operan para minimizar los efectos del boicot.
Funcionarios dijeron que lo mismo deberían hacer las firmas francesas y alemanas que exportan hacia Estados Unidos.